Valeria Ripoll sigue sumando cuestionamientos en filas de Adeom Montevideo, el sindicato que supo encabezar hasta hace pocos meses. Sancionada esta semana con la pérdida de “derechos” como afiliada, ahora debe enfrentar la deserción de sus propios compañeros de la Lista 27 -que fundó. Cinco de los seis dirigentes que integraban el Ejecutivo -incluida la actual secretaria general del sindicato, Silvia Tejera- anunciaron ayer que abandonan esa agrupación.

Lo hicieron a través de una dura carta, en la que fundamentaron su decisión en la “incomodidad” que les generaba seguir perteneciendo a ese espacio. Según afirman, Ripoll, a pesar de haber pasado a desempeñarse en el despacho del ministro nacionalista Martín Lema en el Parlamento, seguía “tomando decisiones y dando órdenes” en el sindicato.

También porque, “desde su rol en campaña política”, la dirigente “cuestionaba fuertemente decisiones del movimiento sindical” y desmerecía “campañas que ella misma propuso o votó”. Como ejemplo, citaron los casos de la recolección de firmas para plebiscitar la reforma de la seguridad social o el referéndum contra 135 artículos de la ley de Urgente Consideración (LUC).

“Respetamos las opciones partidarias que cada uno tenga, como también reivindicamos la independencia de clase, y no permitimos los continuos ataques a la clase trabajadora de la que somos parte”, aseguran en la carta.

Los dirigentes apuntan a un supuesto personalismo de Ripoll en la dirección de la lista. “Cuando algunos hablan de pluralidad, y a cinco de los seis miembros del Ejecutivo se nos trata de ‘ratas traidoras’ por el solo hecho de querer trabajar por un sindicato o por querer cuestionar, entendemos que no existe tal pluralidad, y se resume a que las ideas válidas son siempre las de una persona”, se asegura. La carta también apunta a la “falta de respeto” y los “calificativos” con los que Ripoll, se ha referido en los últimos días a varios de sus excompañeros.

“La lista es la que no se sentía representada por ellos”, responde en cambio Ripoll sobre sus excompañeros a los que, a su vez, acusa de que “hacían todo a escondidas, sin llamar a ninguna reunión”.

En diálogo con El País, la actual militante nacionalista asegura que las diferencias vienen desde hace tiempo. “Votaban y discutían cosas que la lista no había resuelto”, indica. Ripoll afirma que sus excompañeros, incluso, representan el camino contrario a los principios fundacionales de la Lista 27. “No representan a la lista, se tenían que ir”, concluye.

Consultada, Ripoll señala que “la gota que colmó el vaso” fue la sanción que esta semana recibió por parte de Adeom. La dirigente está actualmente “suspendida” en sus derechos como afiliada, bajo el argumento de que ahora desempeña un “cargo político” fuera de la intendencia.

Ripoll confirmó que la próxima semana presentará un recurso impugnado la sanción, al insistir que representa un claro caso de “persecución política” al basarse, dijo, en una resolución de 2019 que no aplica de ningún modo a su caso.

Ripoll reafirma que los dirigentes que actualmente comandan el sindicato municipal están “partidizados” a favor del Frente Amplio. Además, la dirigente blanca abrió la posibilidad de evaluar si continúa en el gremio como afiliada. “Adeom son 15 años de mi vida. Lo quiero y lo querré siempre”, sostiene. También dice que su “idea es que, mientras sea funcionaria municipal, seguir siendo afiliada, pero se verá”.

Ripoll viene participando hace varios días en la recorrida de campaña del precandidato nacionalista Álvaro Delgado, que el jueves le manifestó su respaldo. Lo hizo con parte del discurso que Wilson Ferreira Aldunate realizó en Concordia en 1984, poco antes de retomar al país tras su exilio. “Los que nos tocan la oreja no saben dónde meten el dedo”, relató en Tacuarembó el postulante nacionalista.