El expresidente Julio María Sanguinetti criticó la actitud que viene mostrando Cabildo Abierto en cuanto a su negativa de votar, por el momento, la reforma de la seguridad social. Y añadió que “las amenazas” llevadas adelante por el partido liderado por el senador Guido Manini Ríos, ya están agotándole “la paciencia”.

“Todos salimos a la puerta de la casa de gobierno a expresar nuestra conformidad. El propio general Manini dijo que se habían contemplado sus propuestas. Se reconoció que no se cerraba el capítulo de algunas modificaciones, para mejorar el proyecto, sin tocar lo sustancial (…) Desgraciadamente, Cabildo Abierto al otro día ya estaba cuestionando lo acordado”, señaló el exmandatario colorado en declaraciones a El País.

Ante los cuestionamientos de algunos dirigentes cabildantes -y también frenteamplistas- en cuanto a los tiempos en que se quiere aprobar la reforma, el dos veces presidente señaló que no se tiene “apuro ninguno”, pero alertó que “hace dos años ya que se está tratando de cumplir el Compromiso por el país”, en referencia al texto firmado por todos los líderes de la coalición luego de la primera vuelta de 2019 y antes del balotaje.

“El 17 de octubre del año pasado se solemnizó un acuerdo -insistió Sanguinetti-. No se puede faltar a la palabra. En lo que estamos de acuerdo, se acepta, en lo que no, estamos todos igualmente comprometidos a votar el proyecto de la coalición. Y si no hay ley, no será por nuestra responsabilidad sino la de quienes incumplen acuerdos”

En cuanto a si la coalición está en juego por este diferendo, el secretario general de los colorados dijo: “Espero que no, porque asumo que todos cumpliremos finalmente lo prometido”.

“No me cabe la idea de la violación de la palabra. Lamento sí expresiones descomedidas del senador (Guillermo) Domenech, que dice que pueden no votar y que si no votan, que los echen porque ellos no se van. Podrán quedarse, pero está claro que tendrán que asumir su responsabilidad. Nosotros hemos colaborado con mucho esfuerzo, mucho aporte técnico, mucha paciencia, nos hemos mordido la lengua para no contestar intemperancias e incumplimientos, pero todo tiene un límite”.

Sanguinetti, de todas formas, dijo esperar a que se llegara a un acuerdo al respecto y se termine votando la reforma. Pero en este sentido también advirtió: “No es un acuerdo con Cabildo. No es un acuerdo de nuestro presidente con Manini. Nosotros tenemos voz y voto. Me consta que él planteo dos condiciones y cuando fue dio su respuesta negativa, porque ya no eran dos sino ocho… Confío, anhelo, que haya entendimiento. El futuro del país está por encima de todo y se le pone en riesgo con perfilismos y protagonismos personales que no contribuyen a la buena causa”.