Redacción El País
Al cuarto día de que comenzara la guerra entre Israel y el grupo terrorista Hamás, la coalición de gobierno y la oposición no lograron acordar una única declaración de rechazo en el Senado. Los legisladores discutieron -con varios momentos de tensión y acusaciones cruzadas que llevaron a que la vicepresidenta, Beatriz Argimón, pidiera calma en la sesión en varias ocasiones- sobre cómo debería posicionarse el Parlamento. El punto álgido era cómo calificar el accionar del Estado de Israel en respuesta a los ataques terroristas que comenzaron la madrugada del sábado.

Hubo dos mociones arriba de la mesa. Una del Partido Nacional, el Partido Colorado y Cabildo Abierto que daba su “más enfática condena” por el “brutal accionar” de Hamás, y su “respaldo a la seguridad y el derecho a defensa del Estado de Israel en el marco del derecho internacional”. Es la primera que se consideró y la que tuvo la mayoría de los votos del Senado.

El texto que se presentó tuvo algunas diferencias con otro que circuló el lunes, debido a cambios que pidieron los liderados por Guido Manini Ríos para dar su apoyo. Por ejemplo, no se llamó a la “comunidad internacional a actuar para impedir que otras organizaciones terroristas de la región participen en la guerra de Hamás”, tal como decía la declaración del Partido Nacional y el Partido Colorado.

La declaración del oficialismo no recibió el apoyo del Frente Amplio. Y es que la izquierda decidió, además de rechazar y condenar las acciones terroristas de Hamás, condenar las “acciones del gobierno de Israel que están provocando un creciente número de muertos y heridos en la población civil, a lo que se suma un bloqueo inhumano que deja sin acceso a agua, energía eléctrica y alimentos a más de dos millones de palestinos”.

El senador Mario Bergara indicó que su fuerza política condena el “ataque terrorista de Hamás” y que procura que se “activen mecanismos para que se vaya a un proceso pacífico”. Pero en el “medio” tiene un “problema”: el “derecho a la defensa de Israel, que compartimos, no admite algunos extremos”.

La postura de la izquierda generó críticas del oficialismo. Uno de los que la cuestionó es el senador blanco Sergio Botana al decir que no se pueden tener “declaraciones que dejen lugar a dudas”. Y continuó: “Hay que ir en el sentido de condenar lo que hay que condenar. Y de no condenar un país que intenta simplemente defenderse a él y sus valores”.

Bergara, por su parte, respondió al oficialismo al decir: “Cuando se intenta pintar la caricatura de que no condenamos el terrorismo… Dado que cada uno especula con las intenciones de cada uno, también lo voy a hacer, al borde del reglamento. ¿No será que lo que se procura es utilizar una situación tan dolorosa para un juego político menor?”. En ese momento, el senador blanco Sebastián Da Silva lo interrumpió para gritarle: “¿Hay que escuchar esto? Miles de muertos”.

Más tarde, el senador comunista Óscar Andrade dijo que no les “duele menos la muerte del niño israelí que el palestino”, ni les “duele menos la muerte del civil israelí que el civil palestino”. Y continuó: “No creo que nadie pueda respaldar las declaraciones del ministro de Defensa de Israel, que dice que van a atacar porque son animales. ¿Nada para decir tiene el Senado? ¿No podemos llegar a un acuerdo de que esto está mal?”.

Da Silva señaló que “no hay país en el planeta que resista un ataque de estas características sin el natural derecho a la defensa”.

Después tomó la palabra el senador (suplente) cabildante Marcos Methol, quien aseguró que su partido “condena firmemente y sin matices las acciones terroristas que ha emprendido la organización terrorista Hamás”.

El colorado Germán Coutinho consideró que el “ataque terrorista” lo vivieron “como en carne propia”, y lo condenan “desde lo más profundo” de sus “alarmas orientales”.