Redacción El País
Como tiene definido desde hace tiempo, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, estará gran parte del tramo final de su mandato en recorridas periódicas por todo el país, para cortar cintas de distintas obras de infraestructura, un eje de su gestión que considera un pilar de este gobierno, y que el oficialismo planifica usar como insumo en las discusiones con el Frente Amplio en un año que será de campaña electoral.

Así, la palabra “récord” -para hablar de inversiones en obra pública y en cantidad de intervenciones, sobre todo, en materia de rutas, puentes e intercambiadores- se escuchará mucho en los discursos que por doquier darán tanto Lacalle Pou como el ministro de Transporte y Obras Públicas, José Luis Falero.

Ya algo de esto fue adelantado en las últimas horas por el portal de Presidencia, en donde se consignó que en 2023 se realizó una inversión de US$ 1.002.000.000, una cifra similar a la que se ejecutará durante este 2024, según indicaron a El País fuentes del Poder Ejecutivo, lo que -tomando en cuenta lo ya invertido en los dos primeros años del gobierno- redundará en una inversión total para todo el período cercana a los US$ 3.600 millones. Eso, en cantidad de kilómetros intervenidos, equivale a 9.400 en el lapso de cinco años.

“Tenemos obras en ejecución en todo el país. Si arrancamos por el norte, tenemos la ruta 27, de Rivera a Vichadero. Tenemos obras en la ruta 30, desde ruta 5 a Artigas”, puso de ejemplo Falero en las declaraciones recogidas por la web de Presidencia.

Y siguió: “En el centro va a quedar pronta, sobre abril o mayo, la ruta 20, que une la ruta 5 con la 24. Vamos a tener pronta la 81. La ruta 14 se viene trabajando en varios tramos; en la parte que une Lascano con Varela va a tener un avance fuerte durante el primer semestre y sobre fin de año va a quedar prácticamente terminada. La ruta 15, que une Lascano con Velázquez, va a quedar pronta sobre mitad de año”.

El jerarca también apuntó que la doble vía de la ruta 5, hacia el departamento de Durazno, tendrá concluido un 80% de edificación para fines de este 2024.

En Canelones, en tanto, llegarán a su fin en estos días los trabajos en ruta 81, que une las rutas 33 y 5. Lo único que quedará por completar de este trayecto es la rotonda en San Bautista, que se concretará en febrero, agregó Falero.

De otro lado, también está previsto que comiencen obras nuevas que ya pasaron por todas las fases previas, de estudio técnico, licitación u asignación. Una de ellas es la reparación de la ruta 1, entre Riachuelo y Tarariras.

Otro punto a trabajar durante el año serán las soluciones en determinados cruces transcurridos, como en la Ruta Interbalnearia a la altura de Salinas -donde según indicaron a El País al momento hay algunas complejidades técnicas a resolver, dado el “espacio reducido” para hacer una obra de estas características, en comparación con otros lugares- o en el empalme entre las rutas 101 y 102. Aquí, según proyectan en el gobierno, se hará el primer intercambiador a tres niveles que tendrá Uruguay, para dar paso a tres direcciones: al barrio y residencias de la zona, el camino hacia Pando y el que conduce al Campeón del Siglo, el estadio del Club Atlético Peñarol.

Algo muy similar se espera con el intercambiador que se proyecta para la entrada a la ciudad de Canelones, que incluso las autoridades estiman que pueda verse concretado antes que el de la 102 y 101.

Y también se proyecta algo en esta línea en la entrada a la ciudad de Florida, en donde se busca eliminar la rotonda de acceso.

En cuanto al mejoramiento de la red vial en general, además de las que el ministro ya anunció públicamente, el gobierno tiene planificado, por ejemplo, completar la doble vía de las rutas 8 y 9 hasta la altura de Rocha; reparar gran parte de la ruta 30, que había sido inaugurada en 2018 por el último gobierno del Frente Amplio pero que no resistió el peso del tráfico. O intervenir, una vez finalizado el período, en alrededor de 250 puentes.

“Son obras que van a generar un cambio importante, que nos van a dar la tranquilidad de tener rutas más seguras”, reforzó Falero en la nota de prensa.

Finalmente, el ministro confirmó que se avanza en la definición del trazado definitivo de la primera autopista del país, que actualmente se proyecta entre la ruta 8 y ruta Interbalnearia.

Como la idea es que no se interprete que estas obras son producto de un gobierno del Partido Nacional, sino de toda la coalición multicolor, el ministro Falero ha tenido contactos con varios dirigentes de los partidos socios de la alianza oficialista, que son referentes de distintos departamentos, para ponerse a disposición y brindar toda la información necesaria: la ideas, les insistió, es que toman las obras como propias.

El mensaje político a transmitir a la ciudadanía, señalaron fuentes ministeriales, es que “el dinero de los uruguayos se utilizó en forma eficiente”, y entonces se buscará trazar comparaciones con lo hecho por el Frente Amplio en administraciones anteriores.

“Tenemos que mostrar que se podían hacer cosas”, señaló un integrante del Ejecutivo. Y con ese mensaje, agregó, se buscará responder a las críticas del Frente Amplio, que se esperan intensas durante todo este año electoral.