ESTUDIARÁN CRISIS
El grupo tiene como fin promover una salida pacífica a la crisis venezolana mediante nuevas elecciones presidenciales y la distribución de ayuda humanitaria.
Costa Rica acoge durante este lunes y martes la tercera reunión del Grupo Internacional de Contacto (GIC) sobre Venezuela, que tiene como fin analizar la crisis venezolana.
El lunes los equipos técnicos se reunirán para preparar la agenda y un proyecto de declaración, con miras a la reunión de cancilleres del grupo que se efectuará el martes en la sede del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), situado en el noreste de la capital.
Este lunes en la noche está previsto que se inaugure el encuentro con la presencia del presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, y la vicepresidenta de la Comisión Europea y Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini.
Esta será la tercera reunión del Grupo Internacional de Contacto. La primera fue en Uruguay y la segunda se celebró en Ecuador a finales de marzo.
"Para el gobierno de Costa Rica, la reunión en San José, representa un reconocimiento de su liderazgo y los esfuerzos diplomáticos realizados en la búsqueda de una salida política a la crisis en Venezuela", declaró en un comunicado el ministro costarricense de Relaciones Exteriores, Manuel Ventura.
El GIC está conformado por Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Portugal, España, Suecia y el Reino Unido, así como por países de América Latina: Costa Rica, Uruguay, Ecuador y Bolivia. Se conformó por iniciativa de la Unión Europea y es considerado como el único mecanismo que hasta el momento tiene acceso a todas las partes relevantes en Venezuela.
El grupo tiene como fin promover una salida pacífica a la crisis venezolana mediante nuevas elecciones presidenciales y la distribución de ayuda humanitaria.
Venezuela afronta una crisis política y social que se acentuó después de que el pasado 23 de enero el líder del Parlamento, Juan Guaidó, se declaró mandatario interino al invocar unos artículos de la Constitución venezolana.
Guaidó ha logrado el respaldo de buena parte de los países del continente americano y una veintena de naciones europeas.
La oposición venezolana -que no reconoce el nuevo mandato de seis años que juró Nicolás Maduro el pasado 10 de enero, al considerar ilegítimas las elecciones de mayo del año pasado- asegura que el país atraviesa una "emergencia humanitaria compleja" y ha pedido ayuda a la comunidad internacional para atenderla.
El pasado martes, Guaidó encabezó un efímero alzamiento militar junto a unas decenas de militares y el líder de su partido, el dirigente Leopoldo López, quien burló la condena de casi 14 años de prisión que pagaba en su domicilio para sumarse al movimiento.
Ese día, Guaidó rodeado de militares y vehículos blindados de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) llamó a la Fuerza Armada a desconocer a Maduro, como ha hecho casi cada día desde que ascendió a la jefatura del Parlamento el pasado enero.
Maduro calificó esta acción como un intento de golpe de Estado, aunque Guaidó ha dicho que en Venezuela solo habría ruptura del orden constitucional si llegaran a apresarle.