Redacción El País
La dirección del Casmu entró en conflicto con el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) por el cese de un médico, quien fue relevado por supuesto abuso sexual. La institución sostuvo que se tuvieron todas las garantías en el proceso, mientras que en una nota enviada a la institución el gremio pidió reconsiderar el sumario por supuestas irregularidades en el proceso.

Según se señaló desde la institución médica a El País, y así figura en el acta del sumario, el despido -que sucedió en 2021- se produjo con todas las “garantías del caso”. De hecho, se destaca que una comisión tripartita fue la que votó por unanimidad el cese del médico denunciado por abuso sexual. Es decir que el delegado de esa comisión por el SMU estuvo de acuerdo con el despido.

El caso pasó hace dos años pero ha sido motivo de conflicto entre el gremio y la empresa. De hecho, en reclamos realizados por despidos, el Casmu le ha contestado al SMU que los tres ceses que se hicieron hasta mediados de 2022 fueron justamente por “temas sexuales”.

El doctor en cuestión es parte de una de las listas que se presentan esta semana a las elecciones del SMU.

El presidente del Casmu, Raúl Rodríguez, confirmó a El País la existencia del caso. “Fue a raíz de una denuncia de enfermería. Ocurrió en (la filial del Casmu) en Solymar. Hubo un sumario administrativo, como se hace acá”, dijo el presidente de la entidad médica.

La denuncia de enfermería refiere a “comportamientos inadecuados” del médico hacia pacientes en ocasiones de realizaciones de electrocardiogramas, sostuvo.

Rodríguez recordó que se conformó una comisión integrada por un representante del Casmu, otro de los trabajadores -en este caso fue un delegado del SMU- y entre ellos eligieron a un tercer integrante independiente, para analizar la situación. “Ese sumario aconsejó el cese y por eso se despidió al médico”, reiteró Rodríguez.

El 10 de noviembre de 2021, la presidenta del SMU, Zaida Arteta, envió una primera carta al Consejo Directivo del Casmu solicitando la “reconsideración del proceso sumarial” dispuesto contra el facultativo.

Arteta pidió a las autoridades del Casmu que realicen una nueva investigación con un nuevo tribunal debido a que, a su entender, “el procedimiento realizado no estuvo dentro de los marcos habituales”.

A juicio de la presidenta del SMU, el sumario que dispuso el cese del médico no escuchó los testimonios ofrecidos por el profesional acusado, lo que “a todas luces podía clarificar y arrojar luz sobre los hechos objeto del mismo, así como otras cuestiones que ya fueron señaladas en el escrito de descargo por el funcionario oportunamente”.

Arteta advirtió: “Es importante señalar y dejar constancia en la presente (carta) que para el SMU es de suma importancia la vigencia de este tipo de procedimiento (el sumario) el cual le brinda indudables garantías a los trabajadores, pero lamentablemente, en esta oportunidad, no podemos dejar de decir que en este caso se desconocieron algunos aspectos de suma relevancia que derivaron en que el procedimiento estuviera apartado de la habitualidad”. La misiva de Arteta finalizó señalando que un nuevo sumario al médico cumpliría con “las garantías del debido proceso”.

El 15 de noviembre de 2021, el Casmu respondió al Sindicato Médico señalando que correspondía hacer “algunas precisiones” sobre el sumario al médico. Tras recordar que dentro del tribunal había un delegado del SMU, el Casmu sostuvo que la resolución de despedir al médico fue tomada por unanimidad del cuerpo. Por ello, dice la misiva del Casmu enviada al SMU: “es que nos ratificamos en la decisión”.

En sus conclusiones, el Tribunal Sumarial del Casmu por unanimidad concluyó: “De las actuaciones llevadas a cabo en el presente (caso) se concluye en la veracidad de lo denunciado (por enfermería) en cuanto a la forma en la cual el sumariado lleva a cabo los electrocardiogramas a las pacientes”.