FIN DE SEMANA

La rambla de Montevideo se llenó de personas que decidieron salir a pasear en un fin de semana de altas temperaturas. Si bien en general la gente guardaba una distancia prudencial durante la pandemia del coronavirus, también se vieron aglomeraciones y grupos de personas conversando, caminando o haciendo deportes.

Las bajadas a las playas continúan valladas en Montevideo y ayer una camioneta de Prefectura recorrió las arenas de Pocitos pidiéndoles a los pocos que no respetaban las señales que se retiraran del lugar.

“Rambla” fue incluso tendencia en Twitter, ya que algunos usuarios se mostraron molestos con la situación y remarcaron que mientras varios se quedan en sus casas para cumplir con la exhortación, muchos prefirieron desoír el pedido del gobierno y salieron igual.

La semana pasada el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, fue enfático al exhortar a que la gente se quede lo más posible en sus casas, como una medida preventiva contra el coronavirus. “Si aflojamos, esto que viene en términos relativos bastante controlado, se dispara”, sentenció.

A su vez, si bien el uso del tapaboca es obligatorio en el transporte capitalino desde el sábado, un relevamiento hecho ayer por El País permitió establecer que muchos de los pasajeros no llevaban este implemento de seguridad.

El movimiento en Punta del Este fue inferior al que se pudo ver en Montevideo. 

De hecho a las personas que estaban en varios lugares públicos se les acercaron efectivos policiales para solicitarles que volvieran a sus casas.

Algunas zonas incluso permanecen con las cintas que prohíben el paso y que se instalaron en el marco de la Semana de Turismo.