Poco resta agregar a un uruguayo si se le dice “13 de marzo de 2020” para que automáticamente conecte esa fecha con uno de los eventos sanitarios más importantes del último siglo: la aparición en el país del covid-19.

A menos de dos semanas de gobierno, el presidente Luis Lacalle Pou anunciaba en conferencia de prensa la detección de los primeros cuatro contagios y la declaración de emergencia sanitaria por coronavirus, que se extendió hasta el 5 de abril de 2022.

Pasaron cuatro años desde ese día que marcó el inicio de una etapa que incluyó el pedido de “quedarse en casa” y la aplicación de la “libertad responsable”, ante un virus desconocido que amenazaba con paralizar la vida cotidiana tal como era conocida.

En un escenario diferente al de otros países, que aplicaron el confinamiento o lockdown por meses, el SARS-CoV-2 dejó un saldo nacional, hasta ahora, de unos 7.700 fallecidos y por encima del millón de casos confirmados.

Así como también tuvo la aplicación local de más de nueve millones de dosis anticovid, que llegaron en febrero 2021 y que se siguen aplicando, en otra versión, y no a la población general. Todo esto con el uso extendido y obligatorio por momentos del tapaboca, entre otras medidas.

“El covid sigue siendo un problema de salud pública. No desapareció”, dijo hace dos semanas la directora general de salud, Adriana Alfonso. Por esa fecha, la ministra Karina Rando relató que se estaba dando un “aumento sostenido” del covid, aunque descartó una nueva “ola”.

Foto: Estefania Leal

El País consultó a expertos sobre la situación actual, en medio de una nueva campaña de refuerzo vacunal para algunos ciertos grupos de riesgo.

El virólogo Gonzalo Moratorio señaló que Uruguay hoy “está tranquilo” con el covid-19, “epidemiológicamente hablando”, pese a la “fluctuación” de casos que aseguró es “normal”.

“Tenemos que entender que llegó para quedarse” el coronavirus, que “claramente no genera los estragos que causó cuando la población era naive, y nunca había visto este virus”, expresó.

El infectólogo Álvaro Galiana indicó que la situación actual, de endemia y no pandemia, es “totalmente diferente”. Con un “número basal” de casos y que pese a los “picos”, estos “no parecen haber sido nada más preocupante”.

“No tenemos una mortalidad importante, más allá de las personas que por una infección viral respiratoria mueren y de quienes tienen un factor de riesgo que pueden tener una enfermedad severa por el covid-19”, agregó.

“Es un virus que ya forma parte del ‘menú’ de virus respiratorios que circulan en la población”, dijo la viróloga Adriana Delfraro, en línea con los otros expertos.

Con este escenario, la situación “varía hacia proteger específicamente algunos grupos”, tras la instalación de redes de vigilancia genómica que funcionan “muy bien”.

El también virólogo Santiago Mirazo planteó que el covid-19 hoy es un “virus endémico”, que se lo vigila “constantemente”. “No ha habido mayor sorpresa desde el 2022 hasta aquí, con un número de casos subregistrado, pero que no tiene impacto en los sistemas de salud como lo tenía la etapa preomicron”, acotó.

Con respecto a la gestión de la pandemia, hay múltiples conclusiones. Moratorio valoró que Uruguay “supo alinear por un tiempo importante al sistema científico con el sistema político”, lo que permitió al país “comprar lo único que no se puede comprar en esta vida, el tiempo”.

Galiana destacó que “se manejó bien” la pandemia, “siempre basándose en datos objetivos, científicos, y evaluando lo que pasaba en el resto del mundo”.

Mirazo, por su parte, dijo que “la nota de Uruguay fue buena al final del día”. Entre las enseñanzas afirmó que “las cuarentenas obligatorias estrictas tienen mucho más perjuicio que beneficio para el control de las enfermedades respiratorias”.