Este lunes comenzó a funcionar el plan piloto de entrega de medicamentos a usuarios de la Administración de los Servicios de Salud del Estado en 10 farmacias de Canelones. El proyecto, anunciado en noviembre, inició con una demanda dispar y con problemas técnicos, que se ajustarán sobre la marcha.

La medida, impulsada por el subsecretario de Salud Pública José Luis Satdjian, implicó un convenio entre ASSE y la Cámara Uruguaya de Farmacias y Afines (CUFA), el Centro de Farmacias del Uruguay (CFU) y la Asociación de Farmacias del Interior (AFI), que comprende a comercios de barrio y a cadenas.

A partir del acuerdo, si un medicamento no se encuentra disponible en las farmacias de ASSE, el usuario recibe un talón que podrá presentar a un comercio privado y así obtener el fármaco.

El mecanismo no sustituye a las farmacias de ASSE, resaltaron las autoridades.

El objetivo es que “el paciente no se quede sin su medicamento”, destacó Satdjian meses atrás, contemplando casos en que haya farmacias con problemas de stock. ASSE cuenta con 600 puestos de dispensación, pero se optó por comenzar con el plan en 10 farmacias de la Red de Atención Primaria (RAP) de Canelones.

La elección se basa en que no se puede implementar en cualquier farmacia, sino en aquellas que cuenten con el nuevo sistema informático “e-medicamentos” de ASSE, “en desarrollo”, que se usa ahora en el primer nivel de atención (policlínicas), explicó a El País Alicia Misa, adjunta a la Dirección de Medicamentos.

Se eligió Canelones, agregó Misa, porque es la zona donde hace más tiempo se está utilizando el sistema, implementado hace meses. En la RAP de Montevideo, “e-medicamentos” también está en algunas farmacias.

De esta forma, si un paciente no consigue uno o más medicamentos en un centro público de Las Piedras, puede ir a una farmacia adherida. El talón tiene un código QR, que tras una lectura en la farmacia confirma la prescripción y habilita la entrega. Se busca que el usuario lo reciba al instante, pero si no hay stock, se prevé que pueda tenerlo en 24 horas.

Si “e-medicamentos” funciona a nivel metropolitano, está previsto que escale a todo ASSE, lo que incluiría centros de segundo y tercer nivel de atención, acotó Misa.

Las farmacias Acosta (San Antonio), Arévalo II y III (Pando), Avenida (Las Piedras), De Del (San Jacinto), Del Camino (Las Piedras), Del Pueblo (San Ramón), Galet (Toledo), Guadalupe (La Paz) y Este (Migues) comenzaron el lunes con el plan piloto del sistema.

La mayoría de los comercios consultados por El País coincidieron en que el primer día el sistema tuvo “dificultades”, que se fueron ajustando con las horas.

La demanda fue dispar. Solo en tres farmacias hubo usuarios que acudieron a retirar medicamentos. La que registró mayor demanda fue Galet, con 60 medicamentos entregados hasta la tarde de ayer; seguido de Arévalo III con cinco y Arévalo II con tres.

“Va a ser un antes y un después para los usuarios”, destacó a El País el propietario de una de las farmacias, quien remarcó como diferencial el “estar a pocas cuadras de las casas de los pacientes”.

El mecanismo, en tanto, presenta un desafío a futuro. Si bien reactiva el flujo de las farmacias más chicas, al momento no genera un rédito económico para los locales. Lo acordado es que una vez que se brinda un medicamento, ASSE lo repone en un día, pero no paga un extra por el servicio. No obstante, esto podría cambiar en meses.

Pese a este punto, que podría generar diferencias entre las partes, las farmacias coincidieron en avanzar con este plan. Algunos locatarios valoraron que fueron “ignorados” en los últimos años, y otros que compiten de forma “desleal” frente a otros sitios que dispensan medicamentos.