Redacción El País
El comienzo de la primavera está marcado por un fenómeno astronómico, el equinoccio de setiembre, que a su vez marca el fin del invierno. La estación en la que comienza a sentirse el calor e irá aumentando de cara al verano, llega sobre el final del mes. A pesar de que popularmente se asocia al 21 de setiembre como la fecha en la que sucede, en realidad es más adelante.
El equinoccio es el momento del año en el que el Sol se posiciona directamente sobre el ecuador terrestre. Esto produce un fenómeno en el que tanto el día como la noche tienen la misma duración. Proviene etimológicamente del latín aequinoctium y significa "noche igual".
Cuando el astro rey incide directamente sobre el ecuador de la Tierra, en un fenómeno que ocurre en cada planeta del sistema solar, hace que la línea que divide las zonas del día y de la noche, que se denomina "terminador", pase por los polos norte y sur del planeta. Esto produce que el Sol proyecte sobre cada punto del planeta la misma cantidad de horas de luz que de sombra durante un día, dos veces por año (en cada equinoccio).
De esta manera, seguirá aumentando progresivamente el tiempo de luz solar, camino a la estación más calurosa y con los días más largos, el verano.
El equinoccio de primavera en 2023 sucederá en el hemisferio sur el sábado 23 de setiembre de 2023 a las 03:50 de Uruguay, según el portal especializado Star Walk.
El hemisferio norte, por su parte, tendrá su equinoccio de otoño en ese momento.