Redacción El País
Varios usuarios de redes sociales denunciaron múltiples fallas en calefones tras la suba del sodio y cloruros del agua de OSE en el área metropolitana, que autorizó hace casi un mes el Ministerio de Salud Pública (MSP) a pedido de la compañía para evitar un desabastecimiento.
Una usuaria de Twitter narró que su calefón comprado hace menos de un año hizo un cortocircuito. “Falló la resistencia ‘no aguantan la sal del agua’ me dice el técnico ‘estamos en zafra porque están explotando todos los calefones’”, escribió. Pero no es el único caso.
“Se rompió el segundo calefón en casa con diferencia de una semana. Y ahora un amigo que vive por la zona me dice que le acaba de pasar lo mismo. “¿A alguien más le pasó? ¿Es algo ya conocido por la salinidad del agua?”, contó otro usuario. Las críticas por el impacto de esta agua se extienden a jarras eléctricas y cafeteras.
El País -que pudo saber de unos cinco casos más- consultó a OSE, la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea), empresas de service y a técnicos en la materia para comprender qué está en juego con los calefones.
Mauricio Ohanian, docente del Instituto de Ingeniería Química de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República, dijo que un aumento de la salinidad sube la conductividad del agua. A niveles de ayer, el promedio en las tres líneas de bombeo de OSE fue de 2.637 micro Siemens/cm (µS/cm), de un límite máximo de 2.981 µS/cm.
Explicó que un mayor nivel de sodio influye en el aumento de la conductividad, mientras que más cloruros también la incrementan y pueden tener más incidencia en el picado de equipos de acero inoxidable.
La suba de la conductividad incrementa la velocidad de corrosión. El impacto puede ser una filtración de la capa de acero, pasible de corrosión, que recubre a la resistencia. Ante una filtración, esta se quema y salta la llave disyuntora. La resistencia se puede cambiar en un servicio técnico.
Otra cosa es cuando se pincha el tanque y empieza a largar agua. Esto puede ocurrir, por ejemplo, cuando un sedimento en el fondo pasible de corrosión luego provoque una fisura, que lo deja inutilizado. En la mayoría de los calefones hay una barra de magnesio que se corroe antes y protege.
En uno de los service consultados -que tienen alta demanda y presentan demoras- detectaron “lodo” en calefones. Esto, dijo Ohanian, puede deberse a corrosión del magnesio u otro sedimento. Otra opción sería el arrastre de corrosión de cañerías.
Fuentes de OSE dijeron que “no hay una posición” al respecto. En la Ursea señalaron que no han relevado casos.