Autorizaciones ambientales
Comenzaron las tratativas entre el gobierno y el gremio.
Son los encargados de firmar las autorizaciones ambientales para cada uno de los emprendimientos que se comienzan en el país. Por allí pasa toda inversión y hasta unas cuantas importaciones que requieren de dicha habilitación. La Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (Mvotma) tiene a estudio tres grandes proyectos: el reordenamiento del Cabo Polonio, en Rocha, el Ferrocarril Central, y la segunda planta de UPM en Durazno.
Sin embargo por un conflicto sindical entre el gremio de trabajadores y las autoridades del gobierno nacional, se ha enlentecido su aprobación. Ayer el sindicato decidió poner las medidas en suspenso ya que las autoridades del ministerio abrieron un ámbito de negociación en el Ministerio de Trabajo.
El sindicato exige la reinstauración de la negociación colectiva, así como una serie de condiciones laborales para los trabajadores de esa dependencia. El gremio de funcionarios había resuelto paralizar toda autorización ambiental de Dinama hasta que no se abra la negociación entre las autoridades y los trabajadores.
La decisión se originó luego que la ministra de Vivienda, Eneida De León, exigió a todos los funcionarios de Dinama que estaban de licencia en enero suspender su descanso para retomar de inmediato las tareas.
Ante el cambio de actitud de las autoridades del ministerio, el gremio decidió tener un gesto y suspender temporalmente las medidas a la espera de lo que ocurra el jueves en el Ministerio de Trabajo.
De no tener un resultado satisfactorio, el sindicato tiene decidido retomar las medidas de lucha y aprobar un paquete nuevo de medidas que comprendan otras dependencias de esa secretaría estatal.
Uno de los puntos respecto al cual el gobierno tiene mayores expectativas está en las autorizaciones ambientales para el Ferrocarril Central, necesario para confirmar la inversión de la segunda planta de UPM. Esto tiene en vilo también a la empresa ya que no confirmará su inversión hasta que se inicien las obras ferroviarias. El gobierno y la empresa constructora querían empezar la obra a comienzos de mes.