Al menos seis edificios fueron pintados entre el sábado 30 y el martes pasado por un grupo de grafiteros. La Policía cree que algunos de ellos son brasileños.

Hasta el momento se sabía que fueron pintados dos edificios ubicados en las calles Mercedes y Vázquez; un tercero en la esquina de Tristán Narvaja y Mercedes y un cuarto que se encuentra en José Enrique Rodó y Minas.

Ayer se constató que otros dos edificios también fueron pintados, sin autorización, por los grafiteros buscados por la Policía, por lo que la suma de edificaciones afectadas llega a seis. Esta vez le tocó a una propiedad situada en la esquina de Uruguay y Gaboto. El grafitero trepó siete pisos del edificio y dibujó símbolos. Luego firmó “Duda. Brasil 2024” con un aerosol de color negro.

El edificio, cuya fachada fue renovada completamente hace tres años según supo El País, tiene grafitis en tres lugares: en una pared enorme que da hacia la calle Gaboto; en la fachada en cuyo frente pasa la calle Mercedes y en una pared de la entrada.

Debajo del grafiti, hay un cartel de una empresa que se dedica a la restauración y mantenimiento de casas. Esa pared se ve como pintada hace muy poco tiempo. Como si quisieran hacer una broma, los grafiteros borraron uno de los teléfonos de la empresa constructora con un aerosol de color negro. “Hace poco que pintaron ese edificio; arreglaron toda su fachada. Los grafitis fueron hechos en la madrugada del sábado 30 de mayo, cuando no había casi nadie allí porque todo el mundo se había ido por la Semana de Turismo”, relató una vecina a El País.

En diagonal y en la vereda del frente, un segundo edificio fue pintado por el grupo hoy buscado por la Policía. El frente de la propiedad, ubicada en Uruguay a la altura del 1754 y Gaboto, fue remodelado hace poco tiempo, según dijo otra vecina.

En esta ocasión, los grafitis no fueron símbolos, sino unas pintadas con tintas de colores llamadas “bombas” por sus formas redondeadas y coloridas. Las “bombas”, por sus grandes dimensiones, se hacen a poca distancia del suelo.

Noelia, una de las residentes del edificio, dijo a El País que algunos vecinos de otros apartamentos intentaron borrar la pintada pero fue imposible. “No sabemos qué pintura utilizan. No es fácil de sacar. Toda esa zona (de Montevideo) está grafiteada. Ni las puertas metálicas de la farmacia de enfrente se salvaron”, lamentó.

Unos 20 metros adelante por la calle Gaboto hacia 18 de Julio se pueden ver otras varias casas y muros pintados. Lo mismo pasó por la calle Mercedes y Gaboto. Al menos 15 casas, muros y dos edificios fueron grafiteados en los últimos meses en un radio de 50 metros, según relataron los vecinos.

Noelia, por ejemplo, ya se resignó. “Por ahora vamos a dejar la fachada así. No hay medios (económicos) para pintarla. Hace tres años que pintamos todo. Las muchachas de la veterinaria (ubicada en Mercedes y Gaboto) colocaron unos productos para proteger la fachada de su comercio y tampoco tuvieron suerte”, dijo.

Noelia consideró que esa zona de Montevideo cayó en decadencia. “Entre las veredas destrozadas y las pintadas, el Centro da asco. En el pasado esto no existía. El problema es que no hay una ley que ordene a la Policía a buscar a los grafiteros y obligarlos a reparar el daño”, sostuvo la vecina.

El director de la Comisión del Patrimonio, Willy Rey, manifestó su preocupación por la situación. En diálogo con radio Sarandí, dijo que “ha venido una suerte de vendaval, de huracán de acciones de este tipo que son acciones empobrecedoras” de Montevideo.

Según Rey, el Estado y la Justicia “no pueden mirar para el costado”. “Sé que la Justicia hoy tiene una cantidad de temas muy grandes y quizás esto le parezca menor, pero acá hay que actuar con mucha dureza”, aseguró.

Foto: Leonardo Mainé

El sábado 30 de marzo y el martes pasado cuatro grafiteros hicieron un “raid”, cuyo eje fue la calle Mercedes. Dos de los edificios pintados se encuentran casi en la esquina de Mercedes y Vázquez; otros dos en Mercedes y Gaboto; un quinto en la esquina de Mercedes y Tristán Narvaja y el sexto se ubica en José Enrique Rodó y Minas.

Las pintadas son investigadas por la fiscal de Flagrancia, Silvia Naupp, y por policías de la Zona I (Cordón, Centro y otros barrios adyacentes).

En los edificios afectados, los grafitis fueron firmados por “Roka”, “Zero”, “Ripa” y “Pestes”, quien según su cuenta de Instagram es de origen brasileño.

Al menos cuatro grafiteros ya fueron identificados por la Policía aunque hasta el momento, la fiscal Naupp no ordenó detenciones.

Movimiento. Las pintadas de los edificios son un fenómeno que hace tiempo copó ciudades de Europa, Estados Unidos y luego arribó a América Latina. En San Pablo, hay grupos de grafiteros que realizan pintadas en alturas. Se destacan en Uruguay los grafiteros “Blitz” y “Duda” por sus grafitis hechos en la antigua Jefatura de Policía de Montevideo y en la avenida 18 de Julio.

Foto: Francisco Flores