Redacción El País
Hay muchas especies de orugas a las que se las llama "bicho peludo", por sus característicos pelos urticantes, que fueron avistadas recientemente en Uruguay. Al contacto con la piel producen irritación y dolor, como una sensación de quemazón. Hay algunas especies dentro del género Megalopyge que pueden considerarse de importancia médica, aunque generalmente los síntomas son tratables a nivel local.
Irasema Bisaiz, cofundadora del Centro Educativo de Cría y Rescate de Reptiles Alternatus Uruguay explicó a El País que se trata "de orugas y larvas de lo que serán mariposas nocturnas". "En Uruguay hay varias especies que tienen como métodos defensivos, para que animales no se las coman, cedas que son como pelos urticantes", aseguró.
Bisaiz indicó que "en el verano empiezan en su etapa de larva a alimentarse de algunas plantas". "Hay especies que se muestran y dejan ver, pero la época en la que más se ven es entre enero y marzo cuando se disparan las consultas", aseguró.
Sin embargo, explicó que "en Uruguay no se han registrado muertes" por picaduras de estas especies. "Las más comunes son por accidentes al tocarlos o rozarlos", dijo la especialista.
A alguno de ustedes se les llenó el barrio de gusanitos negros como bichos peludos negros chiquitos. En punta carretas estamos invadidos, no es un chiste de ningún tipo, solo preocupación. La foto es del árbol pic.twitter.com/kB2Q3QMePh
— Ricardo Piñeyrúa (@profepineyrua) November 27, 2024
Bisaiz explicó que estas especies "pueden encontrarse en jardines, plazas públicas" y "las espinas que tienen cuentan con sustancias que pueden causar enrojecimientos y ardor".
Otras especies que se han visto son las larvas de la Perreyia flavipes, una avispa nativa. "Son tóxicas para el ganado si son ingeridas, sin embargo, juegan un papel ecológico importante como controladores, limpiadores y recicladores naturales", explicaron desde la organización. "Estas larvas se mueven en grupo, pero no son tóxicas para las personas y no peligra nuestra salud por su presencia", indicaron.
Otro ejemplo es el de la larva de la mariposa de la coronilla, que "no son animales de riesgo y tienen muchos pelos y colores, pero no son peligrosos ya que no son urticantes".
Además, la especialista detalló que otra especie que se ha visto últimamente es la oruga de la polilla negra que es urticante. "Cuando se toca a este insecto el dolor se da de forma localizada", dijo Bisaiz.