La intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, dará “la bienvenida a la ciclovía de 18 de Julio” esta tardecita, a la hora 19, en la explanada de la Intendencia. La obra cambió el tránsito de la principal avenida de la ciudad y el país, ubicando en el centro a bicicletas y otros vehículos de movilidad personal (lo llamados VMP), como skates y monopatines. Las últimas cifras que compartió la comuna muestran un ascenso en el uso de este tipo de vehículos en el cruce con Barrios Amorín: de 592 en octubre a 678 en noviembre en la hora pico, de 16 a 19 horas.

En octubre la Intendencia de Montevideo (IMM) defendió el proyecto recordando que en la avenida Pellegrini, en Rosario, hay ciclovía central, al igual que en la Pensilvania de Washington, la Paulista de San Pablo, entre otras. Sin embargo, la obra no convence a senadores y ediles del Partido Nacional, que la cuestionan. A nivel técnico, como la mide el economista Gonzalo Márquez, exdirector de Transporte de la Intendencia de Montevideo, presenta complejidades.

Márquez advierte que es una obra que prioriza un modo efectivo de transporte, pero además identifica las tensiones que genera y comenta sus dudas. “La agenda de la movilidad de la ciudad va en la creación de infraestructura para que las personas puedan moverse en bicicleta. El principal obstáculo es que no haya infraestructuras seguras ni redes. Incluir a la bicicleta en 18 de Julio es parte de esa agenda, así como lo va a ser en buena parte de las principales arterias de la ciudad”, dice Márquez, que integra el Grupo de Estudios Transporte y Movilidad del Centro de Investigaciones Económicas (Cinve).

El economista saca cuentas: 18 de Julio tiene 13 metros de ancho entre cordón y cordón, en el tramo entre Plaza Independencia y Cuareim, donde no habrá ciclovía. Luego tiene 16 metros entre cordón y cordón de Cuareim a Barrios Amorín, hasta la sede de la IMM, y prosigue con 18 metros entre cordón y cordón, hasta el Obelisco. “El desafío es gestionar de forma inteligente el espacio, lo que pasa por privilegiar aquellos modos que usan de forma más eficiente el espacio público”, explica a El País. En ese sentido, en la misma línea que lo planteado por la comuna para justificar la obra, repasa que el ómnibus transporta más personas en menos espacio, seguido por la bicicleta y las motos, y por último, los autos, que usan 10 metros cuadrados aproximadamente para trasladar en promedio a 1,3 personas. Mientras, la cantidad de autos que recorren la ciudad va en aumento.

Aunque coincide con el rumbo, Márquez no arriesga pronóstico sobre cómo será el funcionamiento de la ciclovía. “Hay una asignación de espacio exclusivo para la bici, pero no se ha tocado nada más de 18 de Julio. Cómo esto va a desarrollarse hay que verlo, porque vas a tener lo mismo con espacio asignado para las bicis siendo 18 de Julio un lugar por donde transitan en hora pico 100 ómnibus por hora y por sentido. Es el lugar de la ciudad por donde más transporte público hay”, advierte Márquez, para quien en la implementación es “donde se define buena parte del partido”.

El economista considera que “la ciclovía está correcta, en espacio y condiciones de seguridad, y el espacio para los ómnibus funciona en términos teóricos, pero hay que ver lo que ocurre en la práctica”.

La avenida queda con tres carriles de salida desde Barrios Amorín hacia el Obelisco, donde Márquez no visualiza mayores problemas. “Hay otros lugares donde la situación va a estar más tensionada. El lugar más complejo de gestionar son las dos cuadras que hay entre Yi y Ejido. Hay dos carriles de salida y muchos ómnibus, muchos detenidos en las paradas, y donde se genere algún tipo de interferencia por vehículos estacionados son críticas las afectaciones que puede haber, porque el espacio es muy justo”, agrega el experto.

La ciclovía de 18 de Julio está conectada a la de la calle San José, donde corre de Florida a Yi por la izquierda, por lo que los lugares de estacionamiento pasaron a la derecha. “Por la derecha circula el transporte público, que empieza a tener esta interferencia con los autos. Es una incógnita que esto no termine afectando los tiempos de viaje del transporte público”, plantea Márquez, que también se pregunta cómo será el tránsito por San José cuando por alguna manifestación corte 18 de Julio.

Entre 2008 y 2010, y entre 2012 y 2016, Márquez fue responsable técnico en la comuna para la mejora del funcionamiento del sistema de transporte público de la ciudad y la zona metropolitana. A su vez, entre 2018 y 2021 fue director de Transporte de la Intendencia, donde lideró proyectos como la incorporación de 30 ómnibus eléctricos y una estrategia para una masiva incorporación de taxis eléctricos.

Cosse pondrá en marcha a la hora 16.30 un generador de agua y bebederos públicos en el Teatro de Verano. La gerenta de Gestión Ambiental de la Intendencia de Montevideo, Verónica Piñeyro, dijo a El País que “la idea surgió de la crisis hídrica que atravesó el área metropolitana, el sur del país más que nada, durante este año”. La comuna hizo pedidos de ayuda a instituciones, empresas y a la población en general. “Esas ayudas fueron llegando, algunas de forma inmediata, como para analizar agua de pozo o fondos de algunas embajadas para adquirir agua embotellada; otras que no llegaron para atender la crisis en ese momento, nos van a permitir estar más preparados para posibles crisis futuras, como este caso: una máquina portátil que produce agua a partir de la condensación de la humedad del aire, una donación de Buquebus. Puede llegar a producir 900 litros por día, dependiendo de las condiciones del tiempo”, agregó.