Es verano, las temperaturas suben y los bañistas -tanto uruguayos como extranjeros- se refugian en las playas de Canelones, Maldonado, Rocha y Montevideo para disfrutar y a la vez mitigar el calor. Pero, así como es de disfrutable, la costa supone -al menos- dos riesgos, que todos los veranos se ponen sobre la mesa: los ahogamientos y las quemaduras del sol.

Para evitar daños en la piel, desde el gobierno advierten que no hay que exponerse a los rayos solares entre las 10:00 y las 16:00; y si hay una ola de calor, esa recomendación se extiende a las 18:00. Sin embargo, esto choca con la realidad que se da en los departamentos que tienen mayor cantidad de turistas en las playas, ya que los horarios de trabajo de los guardavidas coinciden con las horas de riesgo más elevado para la exposición al sol.

El cáncer de piel es el más frecuente en Uruguay y el mundo; en el país, se registran 3.200 casos y 146 muertes por su causa anualmente, como informó la directora del Programa Nacional de Control del Cáncer, Marisa Fazzino. A su vez, un reporte del Ministerio de Salud Pública (MSP) indica que la tasa de ahogamientos de Uruguay (3,9 cada 100.000 habitantes) es la más alta entre los países del Mercosur. Sobre este tema también se pronunció el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae), que informó que el 94% de los ahogamientos que se producen en Uruguay suceden en playas donde no hay guardavidas.

La Intendencia de Montevideo es la que tiene el horario más extenso de servicio de guardavidas de las costas, con cobertura desde las 8:00 hasta las 20:00 todos los días durante el verano. En el caso de Maldonado, en la mayoría de las playas el horario es de 9:30 a 19:30. La Intendencia de Canelones ofrece el servicio desde las 10:30 hasta las 19:30, y la de Rocha de 10:30 a 18:30.

Consultado sobre la coincidencia entre el horario de mayor exposición del sol y los servicios de guardavidas, Nicolás Chacón, integrante de la Mesa Nacional de Guardavidas, dijo que el hecho de “que el horario de cobertura sea el mayor posible” es un reclamo de la agrupación “desde siempre”.

“Este tema tiene que tener una mirada desde el gobierno central, porque no todas las intendencias manejan los mismos presupuestos. Entonces a la hora de hablar de poner más personal o poner al personal a trabajar más horas -lo cual implicaría que los trabajadores estemos más expuestos al sol y a las inclemencias del tiempo- sí estaría bueno llegar a un doble turno. Nos parece que el gobierno nacional tiene que ayudar si le preocupa realmente la seguridad acuática cuando sale a promocionar el turismo de sol y playa a nivel internacional”, apuntó.

Este tema también preocupa a asociaciones de vecinos. Los de Punta Rubia, por ejemplo, juntan firmas para pedirle al intendente de Rocha, Alejo Umpiérrez, que se extienda el horario de los guardavidas y se ponga una caseta más. Esto fue descartado este miércoles por el intendente, al menos por el momento.

Carlota De Micheli, vocera de la organización, comentó en una entrevista a Telemundo (Canal 12) que la problemática está en que "cuando amanece la gente se va al mar", lo cual es "muy peligroso" porque "no hay servicio".

Foto: Darwin Borrelli

Al ser consultado sobre este tema, Umpiérrez expresó este martes que el servicio de guardavidas “tiene un costo económico muy grande”. “En el caso nuestro aumentamos cerca de una docena de guardavidas en este período, agregando algunos puestos más porque se ha ido extendiendo el servicio de costa, y representa una cuestión muy onerosa. Nosotros hemos planteado, y se ha planteado ya varias veces, que el gobierno nacional tendría que participar en un servicio que en definitiva no es de los departamentos, sino que es del Uruguay Natural, de la marca país”, aseguró, en conversación con Subrayado (Canal 10).

“Veríamos con buenos ojos que hubiera una movida para, por lo menos, coparticipar en lo que es un gasto muy importante. El salario de un guardavidas es más o menos dos veces y medio un salario mínimo municipal. Cuando les estamos pagando desde diciembre hasta abril, en realidad es como tener una plantilla de 150 obreros todo el año fijos. Trabajan muy bien, cumplen un muy buen horario, y sí, el sueño ideal sería que pudiera haber más ampliación de horario. Económicamente se nos hace cuesta arriba, esa es la realidad”, sostuvo.

Por su parte, el director general de Deportes de la Intendencia de Canelones, Alejandro Pereda, también se refirió a cuestiones de disponibilidad de recursos cuando fue consultado por El País. “La solución a una cobertura más extensa sería poner el doble horario como tiene Montevideo, uno en la mañana, otro en la tarde, lo que implicaría prácticamente duplicar la cantidad de guardavidas. Ni siquiera hay esa cantidad de guardavidas recibidos del ISEF (Instituto Superior de Educación Física) hoy para cumplir esa realidad en todo el país, e implica también un tema de recursos. Cada pareja de guardavidas implica un gasto que está por arriba del millón y medio de pesos en el año. Entonces es un costo muy grande y habría que destinar más recursos”, aseguró.

El jerarca, al igual que Umpiérrez, remarcó que es necesaria una solución a nivel del gobierno nacional, al destacar que “esto tendría que ser tomado a otro nivel, tendría que haber una definición homogénea y única para todo el país de cómo se trabaja la seguridad de las personas en el agua". También destacó que la de guardavidas “es una tarea que de alguna manera entraron a asumir las intendencias porque nadie implementó un servicio como correspondería, que en realidad constitucionalmente la salvaguarda a la vida en el mar es una tarea de la Prefectura y de la Naval”.

De todas formas, algo en lo que Chacón, Umpiérrez y Pereda coinciden es en que los horarios en los que están fijados los servicios de guardavidas son apoyados por distintas mediciones. “La mayoría de los incidentes que atendemos los guardavidas a nivel nacional, en promedio entre el 30% y 40%, suceden en el horario de mayor exposición al sol”, aseguró el integrante de la mesa sindical que reúne a los trabajadores del sector.

“La realidad nos demuestra que en la estadística que se lleva de las intervenciones y los incidentes, el horario en el que no debería haber gente en la playa, en realidad hay mucha gente en la playa, y ocurren accidentes”, sobre todo después de las 16:00, señaló Pereda, haciendo referencia a un relevamiento interno que la Intendencia de Canelones hace cada año.

“Además la población que permanece en la playa en ese horario en el que no se debería estar expuesto al sol es la más vulnerable. Son aquellas personas que no tienen casa en la playa, que se toman un ómnibus el fin de semana y permanecen todo el día en la playa con sus niños, son las personas que menos conocen la dinámica de la playa y menos familiarizados están con cómo se comporta el mar y cómo manejarse. Entonces son las personas que quedan más expuestas”, indicó.

“Retirando el servicio de guardavidas en ese horario estaríamos dejando expuestas a las personas más vulnerables y que más riesgo corren de tener un accidente”, añadió.

También destacó que en el horario de “más temprano en la mañana en las playas, generalmente la población que concurre es la que está más establecida en el lugar. Y lo deseable sería poder cubrir todo el horario, pero en la realidad hemos evaluado que sin duplicar el personal y manejando esa carga horaria de trabajo, el horario más adecuado o la mejor solución que estamos encontrando entendemos que es esa”.

Umpiérrez, por su parte, destacó que el horario "de mayor concentración (de personas en las playas) es el horario de cobertura del servicio”.