VÍCTIMA DECLARÓ ANTE FISCALÍA

A paso lento por el embarazo casi a término, la joven Melina Olivera Arroyo (17) y su sobrino Lucas Correa (8) descendieron del ómnibus que los dejó al costado de los accesos a Montevideo, a la altura de La Teja.

Dejaron a sus espaldas la enorme mole de la Escuela Marítima y enfilaron hacia el puente peatonal para ir a la casa de ella. Melina, quien realiza un curso de estética femenina en la UTU del Cerro, cuidaba al niño en su casa de La Teja, mientras que la madre trabajaba.

Melina y Lucas pasaron por encima del puente en el primer tramo, mientras por debajo de ellos circulaban los autos hacia Montevideo. Cuando la tía y el sobrino alcanzaron el segundo tramo, encima de la ruta por donde iban los vehículos que se dirigían hacia las afueras de la capital, vieron como se acercaba a escasa velocidad el camión con la retroexcavadora.

“Yo la vi venir al camión con la grúa, pero nunca me imaginé que iba a chocar al puente. Los dos miramos para abajo. La grúa le pegó al puente y sentí una fuerte vibración en mis pies”, dice Melina.

Lucas, quien ayer se encontraba con su padre en la zona de Colonia Nicolich, también recuerda el golpe del brazo de la retroexcavadora contra el puente. “Escuché un estruendo como de piedras que se caen al piso. Después el puente se movió y terminamos en el suelo”, afirma el niño.

Según Melina, “la grúa impactó” en sus pies, sintió un golpe fuerte y después cayeron.

El puente se movió y se fue hacia un costado. Y la joven oyó otro gran golpe cuando la mole de cemento tocó la ruta.

“Mi sobrino y yo caímos con el puente. Caímos sentados en una de las barandas”, explica Melina.

Dos autos, entre ellos la camioneta Renault modelo Kangoo del pizzero Pedro Recalde (52), amortiguaron la caída. Recalde falleció en el acto. Tenía pareja y cuatro hijas de dos relaciones distintas.

Según Melina, su sobrino gritaba dolorido. “No sentía las piernas y le dolía la espalda”, afirma la joven.

Lucas sintió su cuerpo caliente, como que algo le hervía. A su costado se encontraban la baranda y grandes trozos de cemento.

El niño preguntó a su tía como se sentía y le tocó la panza. Posteriormente vio que la sangre le corría por una pierna. “Ahí me asusté”, dice Lucas.

El niño tenía un desgarro en la zona genital, que llevó diez puntos de sutura. También sufrió heridas en la pierna izquierda. Una de ellas le costó tres puntos.

Melina padeció una gran raspadura en su pierna derecha y golpes varios en el cuerpo.

Cuando cayeron, sin embargo, el mayor impacto de Melina lo ocasionó el grito de dolor de su sobrino. En ese momento vio la sangre de él en lo que sería el piso del puente. Pensó por unos instantes que la sangre tenía que ver con su embarazo.

Tomó del brazo a Lucas y ambos casi se arrastraron fuera del puente caído. Luego se tiraron en el piso. Melina decía: “Mi bebé, mi bebé”.

Llegó una ambulancia. Un médico atendió las heridas de Lucas, mientras que otro asistió a la joven.

En ese momento, Melina no sentía a su bebé. Tuvo miedo. Pensó que lo había perdido.

Melina fue internada en el Hospital de Clínicas. Mientras hacía reposo, sintió moverse a su beba, lo cual la llenó de alegría. El sábado 14, al día siguiente del accidente, le dieron de alta.

Ella tiene hoy 35 semanas y cinco días de embarazo. La fecha prevista de parto dada por su ginecólogo es para el 22 de diciembre próximo. Su beba se llamará Isabella.

Lucas tiene miedo a caerse en todo momento. Ambos deberán concurrir a terapia para superar el trauma.

El camionero aún no declaró

Todavía no hay fecha para que declare ante la fiscal de Flagrancia, Sabrina Flores, el chofer del camión que transportaba la retroexcavadora que ocasionó la caída del puente peatonal en los accesos a Montevideo a las 18:00 horas del viernes 13. El camionero es defendido por el penalista Nicolás Pereyra.

Luego del accidente, el camionero sufrió una violenta descompensación y fue internado. Por el momento tampoco fueron citados integrantes de la empresa propietaria del camión que transportaba la retroexcavadora. Los empresarios son defendidos por los abogados Pablo Barreiro y Laura Robatto.

Por otra parte, el Ministerio de Transporte y Obras Públicas ya entregó un informe sobre las causas del accidente a la fiscal Flores, según dijo a El País una fuente del caso. Al día siguiente de la caída del puente, el ministro de Transporte y Obras Públicas, Luis Alberto Heber dijo que “hubo desidia y falta de profesionalismo por parte del conductor y la empresa” respecto del siniestro.

Heber indicó que “esperará a que actúe la Justicia” pero que cree que “hay un homicidio culposo muy notorio del chofer que tiene la libreta profesional justamente para evitar estas cosas”. Dijo además que esta no es la primera vez que el conductor tenía advertencias y multas por parte del Ministerio de Transporte. El lunes 16, la cartera resolvió iniciar una investigación administrativa a la empresa de transporte propietaria del camión siniestrado.