Redacción El Paí
En la jornada del domingo 29 de diciembre de 2024 se registró la presencia de cianobacterias en playas de Montevideo. Particularmente en las playas Pocitos, Malvín y Carrasco, debido a la acción del viento.

Luis Aubriot es doctor en ciencias biológicas, profesor adjunto de la Facultad de Ciencias experto en limnología e integró durante un tiempo la comisión de la cuenca del Río Santa Lucía, explicó a El País que desde la facultad se fueron enterando "porque se colocaron banderas sanitarias por episodios puntuales en algunos lugares de las playas". "En general son muy toxicas, aunque eso hay que confirmarlo", aseguró el investigador.

Sobre el fenómeno del domingo, Aubriot sostuvo que "no fue muy extenso en el Río de la Plata" y sucedió "porque comienzan a verse en esta época del año", y en esta ocasión aparecieron "por acción del viento, que las transporta". "Coincidió con un periodo de viento del sector suroeste y luego del sur, eso hace que se transporten por la superficie del Estuario del Río de la Plata a zonas como la costa de San José y Colonia o a la desembocadura del Santa Lucía y pueden aparecer en playas de Montevideo", aseveró.

Aubriot sostuvo que se trata de fenómenos "esporádicos" que "se dan con estos patrones de viento que explican las acumulaciones". "Es diferente a otros años y fenómenos intensos que son producto de una descarga muy importante de biomasa de cianobacterias desde los embalses, como en el caso del Río Negro y los embalses de Palmar y Salto Grande", comentó el científico.

En Facultad de Ciencias tienen un convenio con la Intendencia de Montevideo para el monitoreo de las playas de la capital y trabajan en conjunto "para avanzar en el sistema de detección y monitoreo con herramientas de detección temprana. Cada caso se sigue de forma cercana", dijo Aubriot.

Por su parte, la gerenta de Gestión Ambiental de la IMM, Verónica Piñeiro, comentó que el domingo guardavidas de esas playas dispusieron bandera sanitaria, pero "hoy la situación ya estaba más dispersa y se retiró".

Piñeiro indicó que este lunes llevaron adelante un nuevo monitoreo y en playa Pocitos detectaron "que en una zona no apta para baño quedó una floración aislada".

"Recordamos a la población que si se ve bandera sanitaria se debe consultar a los guardavidas porque puede ser por varios motivos, y se deben tomar las precauciones del caso, como no ingerir agua ni que ingresen los niños", explicó.

La IMM realiza el monitoreo y muestreo en las playas y puede seguirse el estado de las costas de la capital en el siguiente enlace.

Para observar el mapa desde el celular se debe desplazar la imagen hacia la derecha y tocar la cruz que cierra el panela lateral: así permitirá ver la imagen completa.

La bandera sanitaria indica que la playa tiene un riesgo potencial para la salud de la población y cuando se coloca no se puede entrar al agua a bañarse. En ese sentido, se debe consultar a guardavidas, en caso de dudas.

• Floración de cianobacterias
• Alta concentración de coliformes termotelerantes
• Otros eventos que impliquen un riesgo sanitario

• Si en el agua y/o arena existen grumos verdosos con aspecto de yerba dispersa en baja densidad, el agua es apta para baños, pero se recomiendan determinados cuidados. Lo ideal es buscar zonas limpias, evitar tragar agua y lavarse con agua limpia al salir de la playa, prestando especial atención en retirar todo resto de cianobacterias que pueda quedar en la piel y vestimenta. Debido a que los niños suelen ingerir agua y arena accidentalmente, se recomienda que éstos eviten estar en contacto con estas zonas.
  
• Si se ven manchas verdosas o acumulaciones en el agua o arena, pero a su vez hay sectores de la playa que se encuentran limpios, es posible bañarse o estar en los sectores limpios evitando totalmente el contacto con los sectores de manchas verdosas. Al salir del agua, debe verificarse que no queden restos verdosos en la piel o vestimenta, y de ser así remover con agua limpia.
  
• Si en la playa hay espuma verdosa, de aspecto pastoso o costras, en el agua, la orilla o la arena, evitar el contacto con estas zonas. Los niños y personas de piel sensible o con lesiones son especialmente vulnerables.

Foto: Francisco Flores/El País