Redacción El País
Valentina Lapaz, la joven de 20 años que recientemente salió de CTI tras haber recibido un balazo en el rostro el pasado 25 de diciembre, escribió una carta en la que cuenta lo que vivió esa noche.

El texto difundido por Alternativa Durazno fue escrito por Valentina la noche de este martes, confirmó a El País su padre, Marcelo Lapaz.

"Mi último recuerdo de esa noche de supuesta fiesta fue la imagen mía en una ambulancia, siendo vista por los padres de mis amigas y mis viejos, dándome palabras de aliento. Hasta allí llega mi recuerdo del 25", cuenta la joven en su texto.

En la celebración de Navidad, Valentina pasó la primera mitad de la noche con sus padres y luego salió a festejar con sus amigas a un baile al que no llegó a entrar.

"Bajamos de la camioneta, frente al establecimiento del hecho, caminamos un par de pasos hacia la entrada del baile 'X MAS', cuando empiezo a ver que el resto de los jóvenes comienzan a correr y decir "corran, corran"; en ese mismo momento sentí un estallido, un zumbido nubló mi cabeza, no entendí qué pasó. Me senté en el piso y, si mal no recuerdo, veo para enfrente y están mis amigas tiradas protegiéndose. Me subieron a un móvil policial, el zumbido seguía en mi cabeza, ingresé al hospital y ahí reaccioné que aquello que corría (por) mi cuerpo era sangre", detalla Valentina.

El pasado jueves la Justicia formalizó a uno de los detenidos por el ataque a Valentina.

Hoy, Valentinacontinúa internada, pero fuera de CTI. "Tengo la mitad de la cara con parálisis facial, mis expresiones en el rostro no se notan. No se sabe aún si perdí o no un tímpano", explica en su carta y asegura que se siente "en una de las etapas más felices" de su vida.

"Es cierto que la recuperación física me va a llevar mucho tiempo, pero todo eso pasa a segundo plano cuando veo que volví a tener otra oportunidad y que este acontecimiento marcó un día de reflexión en Durazno", continúa la carta. "Decirle a mi familia y amigas que las amo es una bendición, algo que no caigo en la realidad", agrega.

"De a poco me están contando mis amigas y familia todo lo que pasó estos días que me mantuvo inconsciente. Que hubo una marcha, que personas se preocuparon y se acercaron a preguntar, que comenzaron a concientizar acerca de la seguridad", agrega la joven y en su relato agradece a oyentes y lectores. "Su apoyo fue crucial para darle más fuerzas a mis padres, gracias por estar al pendiente, ofreciendo su espacio de escucha y actitud de pelea frente a la injusticia", dice.

La carta de Valentina lleva consigo una reflexión y un pedido por más seguridad. "Como jóvenes queremos divertirnos sanamente, disfrutar de tan linda ciudad, saber que no hace falta comprar una entrada cara para asegurar la seguridad. Ese día dejó visto que no interesan las etiquetas ni el lugar, nos puede pasar en cualquier lado. Merecemos seguridad constantemente en todo momento"

"Es gratificante saber que actuó la justicia, gratificante estar viva, pero no olvidemos exigir seguridad constante para poder divertirnos sanamente sin miedo", concluye. El imputado es un hombre de 27 años al que se formalizó por tentativa de homicidio, porte de armas y porte de armas en lugares públicos. Mientras se desarrolle la investigación, el hombre deberá cumplir prisión preventiva durante 180 días.

En diálogo con El País, Valentina señaló que le tomó "por sorpresa la casualidad", ya que quien le disparó es cliente de su padre. "Mi padre tiene una distribuidora de alimentos, me conoce mucha gente", dijo. En este sentido, planteó que no le guarda ningún rencor. "Es una persona que su realidad es completamente diferente a la mía. La educación es todo, y la educación que recibió no fue la misma, la vida lo llevó a delinquir", expresó.

Para Valentina, el narcotráfico está tomando un rol muy importante en Durazno y se nota en el aumentó de la inseguridad en el departamento.

Marcelo Lapaz comentó a El País que la familia, de cuatro miembros, permanece en Montevideo desde el hecho, aguardando por la recuperación de la joven.

Este hecho derivó en una de las manifestaciones más grandes habidas en Durazno, vecinos y familiares marcharon pidiendo más seguridad y justicia por la joven. En esta instancia, el jefe de Policía departamental, German Suárez, recibió a los manifestantes en la puerta de la Jefatura. A juicio de Valentina, éste actuó de manera "excelente".

La familia Lapaz no pudo asistir, pero aún así agradecieron el apoyo de la gente. "Para que no suceda más y que no haya más Valentinas, ojalá sea lo último que pase", dijo el padre.