PARA REALIZAR EL CASINO SAN RAFAEL
El megaproyecto para el hotel inquieta a las autoridades del gobierno; mañana vence el plazo para que firme el italiano Giuseppe Cipriani.
El terreno baldío ubicado en el predio del viejo hotel San Rafael en Maldonado tiene un futuro incierto. El empresario italiano Giuseppe Ciprianibusca socios inversores para poder cumplir con la construcción del megaproyecto de más de US$ 400 millones y así finalmente firmar el contrato con el Estado uruguayo por la concesión del casino que allí estará ubicado. Sin embargo, lo que se propone no es un asunto fácil y ya uno de los jugadores más potentes e importantes del Este le manifestó, en una reunión que mantuvieron días atrás, su negativa a participar del emprendimiento.
Sergio Grosskopf, el empresario argentino que ha desarrollado una serie de proyectos importantes en Punta del Este, el último de ellos el complejo Fendi Chateau, le dijo que no al italiano Cipriani cuando este lo fue a consultar por una posible asociación.
Mañana se vence el plazo que el gobierno le concedió por segunda vez en un mes a Cipriani para la firma del acuerdo. Sin embargo, la incertidumbre persiste. Incluso existe molestia en la Presidencia de la República por la falta de concreción en un emprendimiento que es de gran impacto para la economía del país, así como también para el turismo. Más aún en momentos donde el gobierno busca consolidar a Punta del Este como un centro para atraer inversores de la región.
El interés de Cipriani por construir el nuevo mega-casino en San Rafael existe y sigue latente. Así lo comentaron a El País dos empresarios que mantuvieron contacto con el italiano. Pero la ecuación económica no le termina de cerrar y alega que desde el Poder Ejecutivo han modificado algunos criterios para el juego de azar, que no fueron tenidos en cuenta a la hora de desarrollar el proyecto. Desde el entorno de Cipriani hacen referencia a la dificultad que genera la autorización para el juego electrónico o juego online. Eso hizo que el italiano saliera a “comprar tiempo”, advierten. Ese tiempo era para conseguir apoyo e inversores.
Uno de los pesos pesados en el sector al que recurrió fue, entonces, a Grosskopf. El argentino es uno de los más fuertes en desarrollo de “real estate” en Uruguay.
“Fue una charla de colegas. Mutuamente nos respetamos. Pero no hubo ningún tipo de negociación. Es un proyecto muy grande (el hotel San Rafael) para la situación, el mercado actual, para el mercado del país y para los problemas que tiene el desarrollo del sector. Es imposible de llevarlo adelante”, comentó Grosskopf en conversación con El País.
Al ser consultado sobre si en la charla Cipriani le manejó algún tipo de alternativa para poder desarrollar el emprendimiento, Grosskopf recordó otra conversación que había mantenido con el italiano antes de anunciar su ideal. “Lamentablemente se lo aconseje, con todo mi corazón, antes que ponga la primera firma. Le dije que se estaba confundiendo, que era un proyecto muy grande para realizarlo. Pero evidentemente, aunque hay una amistad y un respeto como empresarios, prevaleció su pensamiento de hacerlo. El riesgo del empresario lo asume cada uno, ¿no? Yo le dije de corazón que no se meta porque iba a ser feo para él. Muy pesado. Imposible de llevarlo adelante. No tiene un mercado en Punta del Este para hacer eso. Ni lo mío, que es importante, hoy lo tiene”, comentó el empresario que inauguró semanas atrás el complejo Fendi Chateau con la presencia del presidente Luis Lacalle Pou.
El ministro de Turismo, Tabaré Viera, dijo ayer en el programa Doble Click (Del Sol) que mantienen la esperanza que Cipriani firme el contrato el viernes. El jerarca de gobierno dijo que de no firmar se caerá el compromiso con el italiano, y se deberán buscar otros interesados a desarrollar un emprendimiento en San Rafael. Y comentó que hay otros interesados.
Según pudo saber El País, uno de los que mostró su interés a jerarcas del gobierno que trabajan en el tema es Zulamian Desarrollos Inmobiliarios, que tiene varios emprendimientos en Punta del Este de importante magnitud.
Casi US$ 80 millones ya invertidos en el predio
El negocio en el predio del viejo hotel San Rafael es entre privados. Cipriani compró el terreno del hotel que estaba en estado ruinoso y lo demolió para construir la nueva inversión. En total ya lleva gastados unos US$ 80 millones. De no concretarse la firma del convenio con el Estado por la concesión del casino, el terreno seguirá en manos del italiano y quien quiera realizar algo allí deberá adquirirlo, o sea comprárselo. La fecha límite para la firma es mañana viernes.