Redacción El País
La Intendencia de Montevideo (IMM) restaurará el monumento "El abrazo de los pueblos", un homenaje a la inmigración judía en Uruguay que este miércoles amaneció vandalizado.

La comuna emitió un comunicado en repudio por el acto de vandalismo a la escultura ubicada en el cruce de Democracia y Arenal Grande en Barrio Reus y apuntó a que esta "simboliza la convivencia pacífica y tolerante que ha caracterizado a la sociedad uruguaya mediante el encuentro de los pueblos, y busca rememorar la contribución de la colectividad judía al desarrollo cultural y social del Uruguay".

"En ese sentido, exalta el papel de las colectividades inmigrantes en Montevideo como un crisol de personas con muy distintos orígenes y expresa el agradecimiento al pueblo uruguayo por recibir a todas las migraciones, en particular, a la colectividad judía que huía del Holocausto", añade el texto.

Foto: Estefanía Leal

La comuna recordó que este proyecto fue una iniciativa de la arquitecta Charna Furman, nacida de una familia que llegó a Uruguay escapando de la persecución a los judíos. Furman fue prisionera política durante la última dictadura en Uruguay, fue torturada y "además del trato inhumanitario que recibían quienes sufrían la condición de presos y presas políticas, recibió insultos antisemitas y se le negaron alimentos necesarios para respetar sus restricciones dietéticas o la posibilidad de recibir literatura judía, práctica habitual que caracterizó a la Dictadura uruguaya en la represión a integrantes de esa colectividad que enfrentaron el fascismo", dice el texto.

Años después, Furman fue concejal del Municipio C y propuso la construcción de este monumento en un barrio emblemático para la comunidad judía, trabajo que le fue encargado a la artista Nora Kimelman.

Este miércoles se difundieron en redes imágenes de la escultura grafiteada y con manchas de pintura roja, caso que se da en un contexto de escalada del conflicto en Medio Oriente.

Foto: Estefanía Leal

Los atacantes, que se autodenominaron "Anarquistas contra el genocidio", dejaron una carta para reivindicar la vandalización. Allí señalaron que el monumento es usado "para lavarse la cara mientras el Estado de Israel comete un genocidio contra el pueblo de Palestina". Además se acusa a Israel de haber "retomado también el bombardeo, destrucción y asesinato en masa en el Líbano y Yemen".

Como informara El País, el Comité Central Israelita del Uruguay (CCIU) presentó una denuncia policial por este episodio y la artista fue a ver cómo había sido vandalizada la escultura que ella creó. "Es una herida para todos que pase esto en el Uruguay, un país donde siempre se mostró la paz y la receptividad", lamentó Kimelman.