En los últimos días se viralizó a través de redes sociales la aparición numerosa de pequeños insectos, principalmente en Montevideo y Canelones, aunque también en otros departamentos como Florida.
Según divulgó este domingo la organización Alternatus Uruguay a través de su cuenta de Instagram y pudo confirmar El País con expertos en el tema, se trata de insectos llamados Belostoma, conocidos como “cucarachas de agua”.
En conversación con El País, el agrónomo y doctor en entomología, Vitor Pacheco, dijo no conocer que existan “personas dedicadas a trabajar específicamente con este tipo de insectos en Uruguay”. Explicó que su presencia “es común en agua dulce” y que son insectos que se encuentran “atraídos por la luz”. “No es raro encontrarlos”, sostuvo Pacheco.
Consultado sobre la aparición en grandes cantidades registrada en varios departamentos, dijo no saber todavía “qué puede estar siendo afectado para que se dé una aparición numerosa, aunque podría tratarse de condiciones climáticas que favorecen a la reproducción de estos insectos”.
Por otra parte, el doctor especializado en Entomología César Basso dijo a El País que “se está en un momento del año favorable a los insectos” y que “son ciclos que se dan”. “Fin del verano e inicios del otoño brindan temperaturas favorables a los insectos porque no son extremas”, explicó.
Mismo caso se dio en Paraguay
Hace algunos meses se registró en la ciudad paraguaya de Asunción una aparición “llamativa” de esta especie, según reportaron medios locales. Al igual que ocurrió en Uruguay, la “invasión” se divulgó a través de redes sociales, aunque especialistas en el tema coincidieron que se tratan de “insectos inofensivos”.
Insecto
Existen cerca de 20 especies de este insecto que sorprendió a los uruguayos con su invasión, aunque pueden variar en tamaño y comportamiento. “Las más grandes pueden llegar a medir hasta 13 centímetros”, aseguró Pacheco.
También dijo que “no salen mucho del agua”, y es por eso que no suelen verse en grandes cantidades con tanta frecuencia, aunque “siempre estuvieron ahí”.
Son depredadores, y en su alimentación se encuentran peces, anfibios y otros animales acuáticos. Los más pequeños pueden alimentarse de larvas de mosquito, incluidas la del aedes aegypti, mosquito que transmite el dengue.
Tanto Pacheco como Basso destacaron a El País que la característica depredadora de estos insectos los hacen “beneficiosos” en el mantenimiento del ecosistema.
Los Belostomas no transmiten enfermedades ni son agresivos con el ser humano, por lo que “no hay que combatirlos”, aseguró Pacheco. De igual manera, no se recomienda acercarse voluntariamente a ellos, ya que pueden producir picaduras.