EJECUTIVO RECIBIÓ EL PLAN
“Lo que hace esa inversión en infraestructura es explotar la posición geográfica privilegiada que tiene nuestro puerto”, dijo el vicepresidente de la ANP.
Al caer la tarde del viernes 19, la empresa belga Katoen Natie entregó a la Administración Nacional de Puertos (ANP) su proyecto ejecutivo. Allí se presentan las obras que el consorcio realizará en el marco del acuerdo con el gobierno de crear una terminal especializada de contenedores en el puerto de Montevideo.
Katoen Natie tenía plazo hasta hoy para presentar el memorándum de obras que realizará a través de la Terminal Cuenca del Plata, cuya propiedad se divide en un 80% para el consorcio belga y un 20% para la ANP.
“El lunes (por mañana) comenzaremos a revisar el proyecto ejecutivo entregado por Katoen Natie. Será analizado por la gerencia del Área de Infraestructura, Dariel Martínez y su equipo. También por técnicos del Ministerio de Transporte”, dijo a El País el vicepresidente de la ANP, Daniel Loureiro (Cabildo Abierto).
El jerarca señaló que este nuevo paso “es la confirmación de una política portuaria” llevada adelante por el gobierno, que -según él- “viabiliza” la inversión más grande en la historia del puerto.
Katoen Natie acordó con el gobierno del presidente Luis Lacalle Pou la concesión de una terminal portuaria hasta 2081 a cambio de no activar un juicio de US$ 1.500 millones y hacer inversiones superiores a los US$ 450 millones y a implementar rebajas en tarifas de hasta 30%. La concesión vencía en 2031 y se extendió por 50 años, según lo acordado. Esto fue criticado por el FA. Loureiro consideró que estas inversiones habilitan un “posicionamiento estratégico muy importante” del puerto de Montevideo dentro de la cuenca del Río de la Plata.
“Lo que hace esa inversión en infraestructura es explotar la posición geográfica privilegiada que tiene nuestro puerto. Si no se invierte en infraestructura, no se aprovecha esa posición privilegiada”, señaló el jerarca de la ANP.
En los próximos días, el presidente del organismo, Juan Curbelo, firmará el contrato de gestión con Katoen Natie.
Las obras
A mediados de febrero, el gerente de Proyectos de Katoen Natie, Rodolfo Laporta, realizó una recorrida con El País por la zona concesionada a la empresa belga. Con un gesto de la mano en dirección a la bahía, Laporta explicó los movimientos de tierras que deberán hacerse para construir la nueva terminal especializada en contenedores. Y agregó que se tendrá que trabajar en la roca ubicada en el fondo del Río de la Plata y que ello obligará a la contratación de empresas especializadas en la materia de varias partes del mundo.
Los primeros trabajos comenzaron a realizarse en mayo de 2021 y consistieron en excavar entre 200.000 a 250.000 metros cúbicos de roca y sacar dos millones de metros cúbicos de barro. Laporta dijo que se usarán más de tres millones de metros cúbicos de arena. Las obras de expansión en el puerto incluyen una segunda playa de contenedores de aproximadamente 22 hectáreas, un segundo muelle de 700 metros, así como la modernización de los accesos de camiones en la terminal.
El viernes 11, el directorio de Terminal Cuenca del Plata (TCP) -sociedad entre el Estado uruguayo y Katoen Natie- aprobó la adjudicación de las obras a la empresa Jan de Nul, experta en construcción de puertos, dragados y producción de energía en alta mar. Cuenta con experiencia en todo el mundo y estará a cargo del proyecto junto con otras compañías locales y extranjeras.
Estas obras culminarán en 2025, pero ya en 2024 -año electoral- se inaugurará el primer puesto de atraque y se incorporarán nuevas grúas.
El gerente de Relaciones Institucionales de TCP, Fernando Correa, declaró su satisfacción por el inicio de los trabajos. “Estamos ansiosos por dar este gran paso, que no es para el puerto sino para todo el país. Esto tiene un impacto positivo para el medioambiente, para la comunidad, para la generación de empleo y, por supuesto, para el comercio exterior y la economía de Uruguay”, dijo.
Por su parte, el gerente general de TCP, Vincent Vandecauter, indicó que la inversión proyectada superará la estimación inicial. “Pero, lejos de ser un problema, se trata de una enorme oportunidad porque significa que vamos a más, que nos proponemos metas ambiciosas”, concluyó.
Un acuerdo que se pelea en dos frentes
Tras el acuerdo, el camino del gobierno y de TCP/Katoen Natie estuvo lleno de obstáculos. Hubo instancias parlamentarias iniciadas por la oposición sobre si el presidente de la ANP, Juan Curbelo, podía asesorar o no al gobierno previo a la firma con la empresa belga, y críticas desde Cabildo Abierto -que se sumaban a las del FA- sobre el plazo otorgado por el Poder Ejecutivo y la posibilidad de que Katoen Natie pudiera vender sus acciones sin aval gubernamental. A esos vaivenes, se les sumó un reclamo de nulidad por parte de Montecon -competidora de Katoen Natie que opera en los muelles públicos mediante una autorización precaria- ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo y luego una denuncia penal presentada por los senadores frenteamplistas Charles Carrera y Mario Bergara. “La tesis del FA es que se han configurado una serie de delitos muy graves en perjuicio del país, de la administración pública”, explicó Carrera en su momento. En el TCA, Katoen Natie contraatacó al señalar que Montecon no podía iniciar un arbitraje externo contra el acuerdo por haber elegido dirimir el conflicto en dicho tribunal.