ÍCONO DE LA RAMBLA MONTEVIDEANA
Partido Nacional cuestiona rescisión de contrato del emblemático parador de Pocitos.
La rescisión anticipada del contrato de explotación del parador Kibón generó una ola de cuestionamientos desde distintos sectores del Partido Nacional hacia la Intendencia de Montevideo. El edil de la lista 404 del herrerismo Diego Rodríguez Salomón consideró que se trata de “un nuevo fracaso de la gestión del Frente Amplio en Montevideo”. Con similar talante se pronunció el sector Alianza Nacional.
Como diera cuenta El País en su edición de ayer, la Intendencia envió un proyecto de decreto a la Junta Departamental para rescindir el contrato que la empresa Afacor S.A. tiene desde hace 7 años para la explotación del parador de la rambla de Pocitos. El acuerdo de usufructo era por diez años.
Tras firmar el contrato de rescisión, la firma continuará ocupando el local en carácter “precario” durante diez meses. Esto significa que durante ese plazo no pagará el canon a la Intendencia. A su vez, la comuna pretende que la rescisión opere a partir del 28 de febrero de este año, cuando se acordó en la división Desarrollo Económico poner fin al contrato de partes. También se le condonará a la empresa una deuda que alcanza al 60% del canon de todo el período 2018 y enero y febrero de 2019 (14 meses).
Esto ocurre después que Afacor S.A. alegara un incumplimiento de parte de la Intendencia en cuanto a lograr la reubicación de la terminal de ómnibus que se encuentra junto a Kibón. Y que amenazara con iniciar un juicio.
El canon anual que debería pagar es de 2.620.000 Unidades Indexadas (más de $ 11 millones). La inversión realizada por el oferente fue de US$ 3.125.000, incluyendo obras, aportes sociales e IVA.
“Esta regalía comenzó con la administración del exintendente y hoy candidato Daniel Martínez y es continuada por Di Candia, quien es un intendente ausente de los problemas. Una vez más, quienes pagan son los vecinos de Montevideo. Se debe ser más estricto con el cumplimiento de los contratos y respetarlos”, agregó Rodríguez Salomón.
Alianza Nacional.
Por su parte, el edil de la lista 2004 Javier Barrios Bove expresó su preocupación por el futuro del histórico parador de la rambla. También tildó de “otro fracaso de la Intendencia” la rescisión del contrato que la administración de Christian di Candia ha puesto en marcha.
“Es un lugar privilegiado de la rambla de la ciudad, que hoy es visitado por muchos turistas ya que cerca de ahí están las letras de Montevideo; sería una pena que volviera a la ruina, como lo fue antes de 2012”, sostuvo.
“Estudiaremos al detalle el expediente cuando sea remitido a la Junta, ya que existen muchos puntos que nos llaman la atención: como el acuerdo retroactivo al 28 de febrero, o que caiga la licitación pero que el adjudicatario se mantenga ocupando el lugar en carácter de ‘precario’. Lo más llamativo es que la Intendencia debe aprobar los eventos que allí se realicen, y la condonación de parte del canon adeudado”, agregó Barrios Bove.
Según el edil de Alianza Nacional, “ésta es otra licitación de la Intendencia que ha tenido que ser modificada en su canon porque los adjudicatarios no pueden cumplir con el mismo, sin contar las que en el período han quedado desiertas, como las de los estacionamientos subterráneos”.
La terminal que la IMM no sabe dónde poner
Afacor S.A. alegó un incumplimiento por parte de la administración municipal en cuanto a lograr la reubicación de la terminal de ómnibus que está junto a Kibón, “lo que se identifica como un factor determinante que provocó la actual situación desde el punto de vista comercial que imposibilita el poder continuar adelante con el proyecto”.
Durante la administración de Ana Olivera, se manejó la posibilidad de trasladar la terminal a un predio frente al Cementerio del Buceo.
El director de Promoción Económica de la comuna, Ricardo Posada, dijo a El País que el traslado “no estaba en el pliego del llamado a licitación”.