EVALUACIÓN DEL SECTOR
Después del primer mes del año, el gobierno analiza baja de IVA como incentivo al sector; esto ha sido un pedido de los operadores hoteleros.
Recuperación, pero no total. Así definen los operadores turísticos y las autoridades de gobierno la temporada de verano. Y las últimas cifras oficiales confirman esto: entre el 15 de diciembre y el 1° de febrero llegaron a Uruguay 340.000 turistas.
Y hay otro dato que el Ministerio de Turismo califica como “alentador”: un 52% han llegado desde Argentina. La mayoría de los operadores tenían dudas en cuanto a la cantidad de visitantes que podían venir del vecino país, debido a las gigantes diferencias cambiarias y a las restricciones impuestas por el gobierno de Alberto Fernández.
Pero los datos oficiales muestran, también, que han llegado a Uruguay un importante número de brasileños. De hecho 11% de los extranjeros que vinieron desde Brasil.
El resto de los turistas no uruguayos llegaron principalmente de Paraguay, Estados Unidos y Chile.
Estos números son significativamente más alentadores que los que arrojó la temporada pasada, cuando las fronteras estaban cerradas por causa de la pandemia. Sin embargo, son también inferiores a los de 2020, cuando todavía no se habían detectado positivos de covid-19 en el país. Solo en enero de ese año entraron a Uruguay 44.509 turistas. Y eso había significado un aumento del 3% con respecto a 2019.
Los datos primarios dejan bases “sólidas” para “el comienzo de la recuperación del sector más golpeado por el coronavirus”, comentó a El País el ministro de Turismo, Tabaré Viera.
Empuje porteño.
La incertidumbre que generaba la llegada o no de turistas argentinos era alta. Sin embargo, el desembarco de los porteños -y también de muchos rosarinos- a las playas del Este fue importante también en cuanto a lo que gastaron. Y esto, señalan los operadores, fue lo que explicó el “gran movimiento” que hubo sobre todo en la primera quincena de enero.
Dos de los principales hoteles de Punta del Este vivieron un enero que calificaron como positivo. El Enjoy registró una ocupación promedio del 87% -los fines de semana por encima del 95%. En total se alojaron unas 17.000 personas -un 53% de ellas argentinas, 24% brasileñas, 17% uruguayas y un 6% de otras regiones del mundo.
Los números del Enjoy muestran que aún están un 10% por debajo en el nivel de ocupación con relación a enero de 2020. También las tarifas fueron entre un 10% y un 15% más bajas que en 2020, que ya eran más bajas respeto al promedio de las temporadas anteriores, producto de la situación económica regional.
El gerente general del Enjoy, Ignacio Sarmiento, explicó a El País que el arranque del verano confirmó un tiempo de “recuperación”, que fue más explosiva en la primera quincena que en la segunda, donde conspiró el mal tiempo y la disparada de casos de covid-19 debido a la variante ómicron. Sarmiento adelantó que febrero se proyecta bien y que 2022 será un año de “transición” para recién en 2023 llegar a los niveles prepandemia.
Otro de los importantes centros de alojamiento, The Grand Hotel, registró un comienzo del verano “bueno”, dijo el gerente general Alejandro Gómez. “Nos sorprendió el nivel de ocupación. Fue de un 52% en diciembre y 67% en enero, que para nosotros es alto. La tarifa promedio no fue como en años de temporada alta, porque argentinos y brasileños no llegaron a los niveles de la prepandemia. Sí hubo bastantes uruguayos, que no salieron del país y optaron por el turismo interno”, comentó Gómez a El País.
Para el gerente, las proyecciones de febrero también son buenas. Espera una ocupación del 66%.
Más ayuda.
Viera explicó que la temporada ha sido muy despareja. En el Este la hotelería trabajó, en líneas generales, muy bien, y lo mismo pasó con la gastronomía. Sin embargo, otros subsectores del turismo como el transporte, o las agencias de viaje, siguen con grandes dificultades y no han podido recuperarse en esta temporada de verano.
En ese sentido, el jerarca comentó que su cartera, la de Economía y el propio presidente Luis Lacalle Pou, analizan implementar un plan de IVA cero. Esto ha sido un pedido de los operadores hoteleros.
El gobierno analiza el impacto que tendría esa medida en las cuentas públicas. El objetivo sería fomentar el turismo interno en marzo, previo a Semana Santa.
“Se está analizando la propuesta. Buscaremos formas de sostener al sector y que esta recuperación que se inició de forma despareja en el rubro pueda mantenerse y catapultar al turismo para el 2023”, concluyó el ministro Viera.