Redacción El País
La Maratón de Montevideo que se celebrará el próximo domingo 5 de mayo recorrerá 20 barrios de Montevideo y tiene tres recorridos: uno de 10k, otro de 21k y un tercero de 42k.
Para la categoría de 42k el primer premio es de $55.000, el segundo de $35.000 y el tercero de $25.000. Para la categoría de 42k de personas con discapacidad, en cambio, el primer premio es de $20.000. Es decir $35.000 menos que en la categoría general. Además, no hay premios monetarios para el segundo y tercer puesto.
Por otra parte, en la categoría de 21k, el primer premio es de $25.000, el segundo de $18.000 y el tercero de $13.000. Al igual que en la categoría de 42k, el primer premio para la categoría de personas con discapacidad es de $15.000 ($10.000 menos que el primer premio de la categoría general), y tampoco hay segundos y terceros premios monetarios.
Silvia Pérez, directora de Educación Física, Deporte y Recreación de la Intendencia de Montevideo, explicó a El País la razón de estas diferencias entre ambas categorías. "La maratón de Montevideo es una carrera organizada por la Confederación Atlética del Uruguay. Y a su vez la Confederación Atlética depende de la World Atlethic. Esto significa que son carreras de calle, carreras pedestres, para la gente que corre. La gente que va en silla de ruedas es otra disciplina, completamente diferente. Y operan bajo las reglas del Comité Paralímpico, no de la Confederación Atlética de Uruguay ni de la World Atlethic", explicó.
"Como este evento es un evento inclusivo, los invitamos a participar, los premiamos con trofeos y también con un premio económico. Y esto de que se 'paga' menos, pasa en casi todas las partes del mundo. Por ejemplo, en la Maratón de Nueva York, que se va a correr el 3 de noviembre próximo, ahora no recuerdo exactamente el monto, pero ponele que el ganador reciba un premio de 100.000 dólares y el primer premio en la categoría para personas con discapacidad cobre 35.000 dólares", agregó.
"Hay lugares en los que no se premia monetariamente a las personas con discapacidad, porque es una carrera pedestre. Lo que ellos hacen es otra disciplina", puntualizó.
"A vos te puede parecer injusto que cobren menos que el resto de la gente. Pero si le das otra mirada, es injusto para el resto. Por ejemplo, el que corre 42 kilómetros, va a competir contra más de mil personas. El que corre 21 kilómetros, que es media maratón, va a competir más de dos mil personas. Y la persona ciega que corre a veces es la única, entonces está corriendo contra ella misma o contra dos o tres personas más, como muchísimo, cinco. Pasa lo mismo en el caso de las personas con sillas de ruedas."
El País consultó sobre este tema a Eduardo Dutra, atleta uruguayo en silla, que manifestó que "no se valora el esfuerzo".
"Yo pienso que no se valora el esfuerzo. Incluso si el maratón lo fuera a correr sólo yo o pocas personas más, no importa. Los convencionales que corren a pie, ponele que sean 5.000, aproximadamente. Hay un grupo muy selecto, muy reducido, que tienen la posibilidad de acceder al podio, porque hay un grupo élite de 10 o 20. No es que esos están compitiendo contra las 5.000 personas", afirmó.
"Hay carreras de 10k, como la de San Felipe y Santiago, que pagan más que el Maratón de Montevideo, que es uno de los eventos más importantes del año en Uruguay. Si acá pusieran premios atractivos vendrían atletas en silla de otros países, por $20.000 pesos no le sirve a nadie. Conozco a atletas en silla argentinos que vinieron y tuvieron más gastos de lo que podría llegar a ser el premio", indicó.
"En los maratones internacionales, los World Marathon Majors, que son los más importantes del mundo, están igualando el monto del premio a los atletas de élite con los atletas con silla. Afortunadamente eso está cambiando", sostuvo.
Por otra parte, se mostró contrario a lo que manifestó Pérez sobre la diferencias de disciplinas. "Habla de inclusión pero dice que los que corremos en silla de ruedas es otra disciplina y no es así, lo que yo hago también es atletismo", puntualizó.