CRÍMENES DE ODIO
El 30 de mayo de 2019 viajaba con Christine Hannigan cuando tres adolescentes las acosaron y las golpearon. El juicio se siguió como un caso emblemático de violencia contra la comunidad LGBT.
No era la primera vez que Melania Geymonat se sentía agredida ni fue la última, pero ninguna embestida ha sido tan brutal ni ha generado tanta repercusión comola que sufrió el 30 de mayo de 2019 junto a Christine Hannigan.
Esa madrugada iba en un ómnibus rumbo a Camden Town, en Londres, cuando tres adolescentes las acosaron y las golpearon. Video y fotos se viralizaron. BBC, CNN y The Guardian siguieron el juicio como un caso emblemático de violencia contra la comunidad LGBT. Veinte meses después de la golpiza, Geymonat regresó a Uruguay para trabajar en la fundación de una ONG dedicada a mitigar el impacto de los crímenes de odio y además prepara un documental.
“Muchas veces lo que pasa es que cuando sufrís algún tipo de agresión nadie te legitima. Nuestro caso fue la excepción. Sería hermoso pensar que por cada incidente que suceda hay apoyo, y apoyo mundial, como pasó en nuestro caso”, contó Geymonat a El País.
Melania nació y se crió en Soriano, tiene 30 años, es doctora en medicina por la Universidad de la República, se rebuscó en Londres como azafata, donde conoció a Chris, apenas unos días antes de la agresión, y en julio del año pasado se instaló en Ginebra, Suiza, donde trabaja para el Comité Internacional de la Cruz Roja.
“Por el gran alcance y la repercusión que tuvo mi historia, cientos de personas se acercaron para contarme sus experiencias de odio. Al ver la manera en que muchas personas se abrieron conmigo, entendí que había una necesidad de hablar, de visibilizar historias, pensamientos y emociones que permanecen ocultas. Sentí que podía hacer de puente entre esas personas y los recursos que yo tengo ahora”, agregó Geymonat, que pretende que la ONG, aún sin nombre, se registre en las próximas semanas en Ginebra, adonde regresará a fin de mes, y trabaje en red con organizaciones de la sociedad civil de Uruguay.
El objetivo que busca junto a un equipo multidisciplinario en formación es visibilizar y lograr la contención de las víctimas.
En paralelo a este proyecto, Geymonat trabaja en un documental acerca “de los privilegios en la sociedad y qué factores llevaron a que esta historia, y no otras, fuera viralizada”.
Por la agresión, tres adolescentes de 15, 16 y 17 años fueron sentenciados por la Justicia británica.