El Comercio (GDA)
Tras casi dos días de estar internada en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Cayetano Heredia, en Perú, este miércoles murió una niña de 11 años que ingirió pastillas dentro su colegio como parte de un reto viral. La escolar había sido diagnosticada con muerte cerebral.
Los padres de la menor contaron que la tarde del lunes recibieron la noticia de que su hija, quien cursaba el 5to grado de primaria, tuvo que ser trasladada al hospital porque presentaba vómitos constantes. “Yo pensé que era una mala digestión porque me dijeron que había vomitado mucho. Pero al llegar al hospital, me dicen que había ingerido una sustancia”, contó la madre de la niña.
Según señalaron los padres en un principio, la escolar ingirió las pastillas de clonazepam en el interior del salón de clases por un aparente reto viral difundido en TikTok y obligada por otros alumnos.
Precisaron que estas pastillas fueron llevadas al colegio por otro escolar y las autoridades del mismo no se habrían percatado. Además, indicaron que este tipo de retos ya se habrían reportado antes, lo que ocasionó que una alumna terminara convulsionando. “Pido justicia. Que pague la mamá de ese menor que repartió las pastillas en el colegio”, expresó la madre.
Esta situación ha causado la preocupación y la indignación de los padres de familia quienes, tras conocer el hecho, acudieron a la institución educativa para exigir la respuesta de la directora.
Una madre de otra alumna dijo que su hija le contó que fueron los compañeros de clase quienes pidieron ayuda, pero al ver que no reaccionaba llamaron a la ambulancia. Al ver que la escolar seguía convulsionando, una auxiliar la habría trasladado en su vehículo hacia el hospital Cayetano Heredia.
El abogado de la familia de la menor, Mario Arribas, sostuvo que el centro educativo Imperio del Tahuantinsuyo, donde estudiaba la menor, habría incurrido en varios delitos, uno de ellos, el de lesiones graves culposas, que tiene una pena privativa de la libertad de seis años. “Ahora que ya falleció, estamos frente a un homicidio culposo por la inobservancia de la regla de profesión y trabajo, el deber de cuidado”, indicó.
Arribas señaló que todos estos detalles vienen siendo investigados por la Policía Nacional y el Ministerio Público. Sin embargo, refirió que el colegió no habría brindado oportunamente los primeros auxilios y se demoró en trasladar a la menor a un centro de salud.
Agregó que el colegio buscaría deslindar responsabilidad en este caso, es decir, “borrar las huellas del delito y los efectos del mismo”, ya que se contradijeron en precisar la existencia de cámaras.
“Primero dijeron que no había cámaras, luego que sí, pero que grababan de forma parcial. También surge otro tema, ya que la niña fue llevada primero a una posta médica (emergencia), donde por un tema administrativo no la quisieron atender. El factor tiempo es importante en un caso así”, detalló el abogado.
La noche del martes, el Ministerio de Educación compartió un comunicado de la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (DRELM), en el que detalla que el mismo día de ocurrido el hecho, “funcionarios y especialistas de la UGEL 02 brindaron las facilidades correspondientes a las autoridades del Ministerio Público y la Policía Nacional para realizar las investigaciones y el esclarecimiento de los hechos”.
Además, informó que los padres de la menor y los estudiantes de la institución educativa están recibiendo soporte socioemocional por parte de personal especializado. En ninguna parte del comunicado se señaló el grado de responsabilidad del colegio o si se tomarán algunas medidas a manera de sanción para las autoridades a cargo.