Redacción El País
Un terrible caso estremeció este lunes en la ciudad de Young, en Río Negro.Una mujer se roció con combustible y también a su hijo, de 10 años, y se prendió fuego a sí misma y al pequeño. El niño logró escapar para pedir ayuda a sus vecinos y fue trasladado a Montevideo donde aún lucha por su vida.

"El niño sigue en situación de gravedad muy importante" por el compromiso en las vías respiratorias, confirmó este viernes el director del hospital Pereira Rossell, Álvaro Galiana.

"En la medida que no ha tenido complicaciones es un buen dato, sigue estable", agregó en diálogo con Subrayado (Canal 10), recordando que el pequeño ingresó al hospital infantil con compromiso renal, hepático y neurológico.

La estabilidad de estos días ha permitido que el niño ingresara a block quirúrgico para que los cirujanos plásticos le realizaran los primeros tratamientos en las heridas.

Consultado por si su caso se analiza "día a día", Galiana precisó: "Esto es hora a hora. Cada rato que pasa y no ha empeorado es una buena noticia".

El hecho ocurrió sobre las 7:30 de la mañana del domingo, en un predio rural del instituto de colonización en Young, Río Negro.

La mujer, de 53 años, roció su cuerpo con combustible y también el de su hijo. Según confirmó El País con fuentes de la Policía de Río Negro, el menor pudo salir del lugar e ir en busca de ayuda. Cuando los vecinos concurrieron a la vivienda, la mujer estaba "completamente calcinada".

El jefe de Policía de Río Negro, Jhonny Trías, dijo en una rueda de prensa que la versión del pequeño de lo ocurrido es "muy contundente" y que fue corroborada por el trabajo de Policía Científica. "Su versión es muy contundente", agregó.

"El niño llega a lo de un vecinos que está a 50 metros de su casa y pone de manifiesto que su mamá se había quemado y que había intentado quemarlo junto con ella usando alcohol y algún elemento más para mantenerlo junto a ella", explicó el jefe.