Redacción El País
Enrique Antía, intendente de Maldonado, se dirigió personalmente este lunes al lugar donde la está trasladando los escombros del viejo asentamiento Kennedy para rellenar las piletas de oxidación a las que antes iban a parar los vertidos de las barométricas. Allí, un grupo de ambientalistas le esperaban, cortando el paso de los camiones, para hacerle saber sus reparos por el impacto ambiental que puede tener esta obra.
Según confirmó la Intendencia, ese sitio se recuperará para que sea destinado a un espacio público y también, en parte, a una pista de picadas.
"Fui hasta ahí a dar la cara, también fue Jorge Píriz, el director de Ambiente e Higiene, a decirles que eso no era un humedal. Había un hombre de 42 años y le dije ‘hace 70 años esto era un basural’. Pero después cerro el basural en el año 90, se usó para las piletas de las barométricas. Se inauguró la planta de OSE de 2013 y nosotros en agosto de 2016 cerramos la descarga de las barométricas de las piletas para proteger el humedal", enfatizó el intendente.
"Eso no es un humedal, hay todo un cerco de tierra que marca el borde y nosotros estamos rellenando las piletas dentro del cerco de tierra no para el humedal", remarcó el jefe departamental, y aseguró que "durante 60 años toda la caca del Kennedy se iba para el humedal. Ahí me hubiera gustado que todos los vecinos se hubieran movilizado", remarcó.
Este jueves, consultado por El País, Jorge Píriz, director general de Gestión Ambiental del departamento, aseguró que "lo que se está haciendo es rellenar las piletas de oxidación de las barométricas" y que esa "era una zona que ya estaba afectada".
Consultado por si la clase de relleno que se está utilizando en el lugar puede tener afectación ambiental, Píriz remarcó que "repercutía cuando el Kennedy tiraba toda la materia directamente al arroyo, pero ahí nadie hablaba".
"En esa zona lo que va a haber es un gran espacio verde", enfatizó y apuntó que la pista de picadas no es parte de su área de trabajo, por lo que desconoce si finalmente se realizará en esa zona.
La preocupación de los ambientalistas
Además del grupo de ambientalistas que se manifestaron en la zona de rellenado el pasado lunes, este miércoles desde el Centro de Estudiantes de la Licenciatura en Gestión Ambiental (Celga, CURE, Udelar) emitieron un comunicado para expresar su preocupación por las obras.
"El Arroyo Maldonado se extiende desde su desembocadura en el Océano Atlántico, hasta la ciudad de San Carlos. El humedal asociado al Arroyo Maldonado es de gran importancia a nivel regional e internacional ya que es el humedal salino más extenso de Uruguay y presenta una notable heterogeneidad de ambientes", aseguran los estudiantes.
Según el comunicado, "la pista se pretende realizar en el padrón Nº 2572, dentro de la zona que fue delimitada por profesionales académicos como ‘pastizal costero y planicie de inundación’, destacándose por las aves que allí habitan, como también por invertebrados, reptiles y plantas. Esta zona es parte fundamental dentro del ecosistema del humedal, actuando como una esponja natural que absorbe el agua en las crecientes, reduciendo el riesgo de inundaciones. Además contribuye a la filtración de sedimentos, nutrientes y contaminantes, actuando como un depurador natural".
"Consideramos que el relleno de las piletas (localizadas en la zona de planicie de inundación) con material inadecuado y la construcción de la pista de picadas generarán la contaminación del suelo y los cuerpos de agua, lo que podría afectar la calidad de las playas del Arroyo Maldonado y La Barra", agrega.
"A su vez, la construcción y funcionamiento de la pista de picadas, causará contaminación sonora y lumínica, alterando los ciclos biológicos de las especies y posiblemente ahuyentándolas del lugar. Asimismo, estas intervenciones conllevarán la pérdida de hábitats, la compactación del suelo, modicaciones de la red hidrológica del humedal y afectaciones en el ecoturismo", enfatiza el comunicado de estudiantes.
"No estamos en contra de la pista de picadas, sí estamos en contra del lugar elegido. Solicitamos a las autoridades frenar la obra de inmediato, y recomendamos dirigir sus esfuerzos en no realizar más daños y recuperar ecosistemas degradados", sentencian desde Celga.