San Rafael con las horas contadas

Compartir esta noticia
Se trata de una enorme mansión de 1.495 metros cuadrados, construida  en un predio de 5.148 metros cuadrados de superficie. Foto: Ricardo Figueredo

ERRORES CONSTRUCTIVOS DE ANTAÑO

Tras demoler la mansión Loma Verde, continuarán con el histórico hotel de Punta del Este.

En los próximos días, la firma a cargo de la demolición de la emblemática mansión Loma Verde mudará a su personal y equipos a la manzana 815 de Punta del Este.

En las próximas horas culminarán el trabajo de tirar abajo la lujosa casa ubicada al Este del excomplejo hotelero que, según anunció su nuevo propietario, Giuseppe Cipriani, será demolido para luego ser reconstruido en su totalidad.

Esta empresa se trasladará a la referida manzana ubicada también sobre la rambla Lorenzo Batlle Pacheco, donde se levanta la estructura del exhotel San Rafael y se encuentran otros once lotes, uno de ellos adquirido a la propia Intendencia de Maldonado.

El equipo de demolición tendrá como primera tarea derribar las construcciones existentes en los padrones números 10.003 y 10.002 de la manzana. En el primero existe una serie de instalaciones que eran empleadas para el servicio a los clientes alojados en el hotel. En el otro se levanta una casa que fue empleada para uso personal de la entonces propietaria del complejo.

Así queda de manifiesto la autorización concedida por el intendente Enrique Antía cuando aprobó, el pasado 27 de diciembre, la resolución que habilita la demolición de las edificaciones. También se autorizó la instalación de una valla de madera que rodea toda la manzana y que se denomina como “barrera de obra”.

El fallecido presidente estadounidense George Bush se hospedó en la mansión. Foto: Ricardo Figueredo
El fallecido presidente estadounidense George Bush se hospedó en la mansión. Foto: Ricardo Figueredo

La extensa valla, que ya fue instalada, forma parte del cordón de seguridad que evitará el ingreso de personas cuando comiencen las obras.

Hasta el momento, la Intendencia de Maldonado, mediante resolución expresa del intendente Enrique Antía, no ha dado luz verde a la anunciada demolición del complejo. Así lo establecen las normas vigentes que obligan a tramitar los permisos correspondientes para tirar abajo cualquier tipo de construcción. La única autorización involucra a la casa de residencia de la familia expropietaria y a otro tipo de instalaciones empleadas para guardar los efectos del complejo hotelero.

En una nota concedida a El País el 8 de diciembre, Giuseppe Cipriani adelantó que el viejo hotel será demolido para luego ser reconstruido “ladrillo por ladrillo”.

El empresario indicó entonces que existen razones técnicas, de diseño y hasta históricas para realizar la tarea de tirar abajo el edificio cuya construcción finalizó en el año 1948.

“El hotel no está bien desde el punto de vista de su estructura. El proyecto prevé primero la demolición y luego la reconstrucción del San Rafael”, aseguró el inversionista italiano.

No sirve

“Está muy embromado, sobre todo por el tipo de construcción de lujo que vamos a hacer. Es un proyecto de los años cuarenta del siglo pasado. El tamaño de los cuartos, la altura de los techos o las ventanas no se ajustan a lo que quieren los clientes de ahora para un hotel 5 estrellas”, respondió Cipriani ante la pregunta de El País sobre a qué extremo se efectuaría la demolición.

“Al hotel le falta toda el ala derecha. Mirando de frente ves que a la izquierda hay varias ventanas. Del lado derecho, solo una. ¿Por qué? Cuando lo construyeron se quedaron sin acero por el desabastecimiento impuesto por la guerra. Sí les alcanzó para el ala izquierda, no para la derecha”, graficó.

Las tareas de demolición de la mansión Loma Verde no pasarán de las próximas horas. Foto: Ricardo Figueredo
Las tareas de demolición de la mansión Loma Verde no pasarán de las próximas horas. Foto: Ricardo Figueredo

El nuevo hotel tendrá su ala derecha igual que la izquierda, como estaba previsto en los planos originales.

La obra

En una primera etapa la obra se limitará a la construcción de los estacionamientos y otras áreas de servicio, además de la propia sala de juego. Se espera que la inversión sea superior a los 450 millones de dólares.
De forma paralela, el empresario italiano sigue ordenando los aspectos formales y tributarios tanto del padrón propiedad de la empresa Fosara S.A. como de los diez predios que forman parte de la manzana Nº 815 y que eran propiedad de la empresaria Santina Manoukian. Entre otros, la deuda de Contribución Inmobiliaria de los once predios.

El padrón donde se levanta el hotel debía $ 1.173.024 de Contribución y los restantes tributos y tasas que se perciben en la misma planilla.

Los otros diez padrones debían, en conjunto, otros $ 990.246. La deuda por este concepto fue saldada en los primeros días de enero pasado al aceptar el intendente Enrique Antía que el deudor pudiera acogerse al régimen de facilidades de pago existente para los morosos de los impuestos y tributos municipales. Estos predios estaban morosos respecto a los ejercicios 2012 a 2018.

En el mismo sentido, a comienzos de enero, el intendente Enrique Antía determinó la forma del pago producido por la venta de un predio de propiedad municipal que se encontraba en la misma manzana 814 de Punta del Este.

El empresario Giuseppe Cipriani con el Hotel San Rafael de fondo. Foto: Sebastián Umpierrez / Puntapress
El empresario Giuseppe Cipriani con el Hotel San Rafael de fondo. Foto: Sebastián Umpierrez / Puntapress

El terreno, de propiedad municipal, fue usufructuado durante décadas por la firma Fosara S.A. Esto quedó al descubierto durante el estudio de la propiedad de los once padrones de la misma manzana.

Durante décadas se sostuvo que el padrón que alberga al exhotel era propiedad de Fosara S.A. y que los otros diez eran propiedad de la empresaria Santina Manoukian. Al estu-diar los documentos notariales, como las escrituras, saltó que también existía otro padrón en la misma manzana. Era propiedad municipal. Cipriani se comprometió a comprar ese predio de unos 1.389 metros cuadrados de superficie. El mismo fue tasado en US$ 1.600.000.

La casa que desaparece de la postal
Forma parte del paisaje del balneario esteño desde fines de la década de 1970
Un grupo de inversores argentinos desembolsó más de US$ 5 millones para quedarse con la propiedad. Foto: Ricardo Figueredo

Las tareas de demolición de la mansión Loma Verde no pasarán de las próximas horas. Día a día fue desapareciendo del skyline de Punta del Este una construcción que fue considerada como de las más importantes del balneario. Construida en otro tiempo y en otro balneario. La destrucción de la finca deja paso a la instalación de cierta nostalgia en el balneario que todavía no se recupera de una mala temporada de verano. Los pocos conductores que circulan a estas horas por la rambla Lorenzo Batlle Pacheco paran un momento para tomar las últimas imágenes de lo que va quedando, de lo que fue hasta poco tiempo atrás una de las casas icónicas del lugar.

La empresa contratada por el grupo inversor argentino para llevar adelante la faena cumple de forma inexorable el trabajo. A tal extremo que poco o nada de la vivienda sobresale de la amplia loma donde fue construida a fines de los años setenta. La destrucción de las paredes, techos y pilares se lleva adelante con una pala retroexcavadora que apoya su cuchara para tirar abajo enormes trozos de la finca. El trabajo comenzó a fines de febrero pasado y culminará en las próximas horas. Luego quedarán la etapa de levantar el tendal de escombros que dejó el trabajo de demolición. En una primera etapa fueron retirados del lugar los efectos que podrían tener otra utilidad.

El trabajo de demolición fue realizado a la perfección por la misma empresa que en pocos días tendrá el trabajo de comenzar con la demolición de varias estructuras que existen en el predio donde hasta ahora se levanta el exhotel San Rafael de Punta del Este.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Punta del EsteHotel San Rafael

Te puede interesar