¿Cómo se mueven las personas dentro del país? ¿En cuál barrio duermen y hacia dónde se van durante el día? Estas son dos de las preguntas que el Instituto Nacional de Estadística (INE) empezará a responder desde diciembre, cuando publique los primeros datos de movilidad de la población. ¿Cómo lo sabrá? A partir de cómo se mueven los celulares, información que obtendrá de las operadoras telefónicas, en una coordinación con la Unidad Reguladora de Servicio de Comunicaciones (Ursec).
El INE y la Ursec recibirán cada tres meses la información de cómo se movieron los celulares dentro del país. Los datos serán certeros si se parte de la base de que las personas, por lo general, suelen estar con su teléfono, sobre todo a la hora de trasladarse. No obstante, cabe aclarar que las empresas telefónicas darán los datos de manera agregada y anonimizada, de manera que los organismos no van a poder individualizar a las personas. Esto se hace con el objetivo de proteger los datos personales de los usuarios.
El director del INE, Diego Aboal, explicó a El País que van a tener la cantidad de celulares que se mueven en el país. Dicho de otra manera, obtendrán matrices de origen-destino de la población, y en una primera instancia se hará algo similar a lo que hace el instituto de estadística de España.
A modo de ejemplo, el director contó que se podrá saber el número de móviles que estuvieron en San José durante la noche y en Montevideo durante el día. Así como también habrá información a nivel de barrios, que puede ser por ejemplo en Pocitos durante la noche (al asumir que es el lugar de residencia) y en los barrios Centro y Ciudad Vieja durante el día (lugar de trabajo).
En España, el instituto de estadística hizo diferentes estudios de movilidad de celulares en los años 2019, 2020 y 2021. Para esto, dividió su territorio en 3.214 áreas de movilidad, y excluyó de la investigación los números extranjeros con el objetivo de afinar la población residente en el país.
Para España, el área de residencia es donde el teléfono “se encuentra durante más tiempo entre las 22:00 del día anterior y las 06:00 durante el día observado”, dice el informe del proyecto español. Por otra parte, para “determinar el área de destino cotidiano” toma “todas las áreas (incluida la de residencia) en las que se encuentra” el móvil “durante el horario de 10:00 a 16:00 del día observado”.
Durante el día, si el celular está en más de un lugar, dan por válido aquel en el que esté más tiempo, que no sea donde vive. No obstante, si el celular no se mueve del lugar de residencia, también se cuenta a esta área como la de destino.
El INE y la Ursec están en conversaciones con las operadoras para conseguir la información.
Detalles de la iniciativa
Un dictamen de la Unidad Reguladora y de Control de Datos Personales (Urcdp) -ante una consulta de la Ursec- da detalles de la iniciativa que se quiere llevar adelante.
Allí se indica que dentro de los objetivos del Proyecto de Movilidad de Celulares están la “elaboración de políticas públicas en situaciones de emergencia, inmigración y turismo, transporte, planificación de censos poblaciones y otros procedimientos similares, seguimiento de fluctuaciones de movilidad poblaciones y otros elementos de planificación urbana y despliegue de redes de telecomunicaciones (calidad, resiliencia, etcétera)”.
Otro de los puntos, dijo la unidad en su dictamen, es que en el proyecto se “garantiza la confidencialidad y reserva de la información a nivel de cada operador de telefonía móvil”. Por lo tanto, no se podrá saber cuántos usuarios de cada compañía se van a trasladar ya que toda la información estará homogenizada, sin poder distinguir eventualmente entre Antel, Claro y Movistar.
Una de las recomendaciones de la unidad de datos personales fue que se debe “tener ciertos resguardos en cuanto al lugar donde se alojarán los datos”. Otro aspecto a considerar, apuntó, es el “tiempo de conservación”, algo que a mayo no surgía “claramente determinado en el proyecto”. En caso de que ya se supiera, se aconsejó aclararlo y, en caso de que no, definirlo.
También apuntó que se debe considerar el “cruzamiento de información de forma tal que se evite la potencial situación de que una persona pueda ser identificable”. En este sentido, se indicó que el proyecto de movilidad que se presentó ante la unidad dice que, “si los datos dan menos de 15”, se van a redondear a 15. Pero se les recomendó “verificar si este mínimo es suficiente y cuáles son los fundamentos para utilizar esta cifra y no otra”.
Por otra parte, la unidad señaló que “se entiende que existe la posibilidad de eventualmente aplicar Inteligencia Artificial”, por lo cual aconsejó “revisar nuevamente los procesos y evaluar el impacto de este tipo de desarrollos”. Y añadió: “Si se identifican riesgos en este aspecto se recomienda retomar el contacto con esta unidad para evaluar la situación”.
Datos del censo se publicarán antes de que termine el año
El director del INE, Diego Aboal, indicó a El País que los datos del censo nacional de 2023 se publicarán el 10 de diciembre. Llegarán un año después de que se presentaron los resultados preliminares en el Auditorio Nacional del Sodre, donde se informó que Uruguay cuenta con 3.466.263 residentes, lo que implica que hubo un crecimiento de 1% en comparación a 2011, cuando se registraron 3.412.636 habitantes.
También se indicó que solo en los últimos 11 años 61.810 personas decidieron migrar a Uruguay.
El censo aporta “información con distintos grados de detalle en referencia a la población total del país o de un área particular del mismo, teniendo en cuenta el sexo, la edad u otras características, en función del lugar de residencia”, dice el INE en su sitio web. Y añade que “constituyen una fuente relevante de información demográfica y socioeconómica, así como el marco de muestreo para la ejecución del plan de encuestas continuas de hogares”.
Así el INE realiza un informe de natalidad y las perspectivas de crecimiento de la población, tal como informó Aboal a El País. En esa línea, indicó que las perspectivas de tasa de natalidad a nivel nacional que se hicieron a partir de los datos del censo de 2013 se ubicaron “muy por fuera de lo que pasó”.