El diputado nacionalista de Rocha, Alejo Umpiérrez, le dijo ayer en el Parlamento al ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre, que el gobierno viene manejando con un "innecesario secretismo" las tratativas con un grupo chino de la ciudad de Zhousan para instalar una planta de harina de pescado en base a anchoíta en La Paloma.
Umpiérrez le dijo también a Aguerre que la planta, en caso de construirse, debe estar fuera del casco del balneario y advirtió que, desde el punto de vista ocupacional, la pesca de esta especie no tendrá mayor impacto.
La harina de anchoíta se utiliza para alimento de cerdos. Umpiérrez dijo que en La Paloma no quedó un buen recuerdo de cuando funcionó una planta de ese tipo por el mal olor que generaba. El legislador dijo también que el ministro Aguerre demoró seis meses en concurrir al Parlamento a informar, pese a que había sido invitado el año pasado.
El grupo chino también está interesado en la explotación de la merluza negra, una especie cuya captura está regulada por convenciones internacionales, por la que se pagan precios elevados. Aguerre señaló que las licencias (tres) que el grupo pretende aún no están concedidas. La empresa china dice que está dispuesta a invertir US$ 50 millones. En La Paloma han aparecido voces que se oponen al proyecto que es impulsado por el intendente Aníbal Pereyra.
INVERSIÓN EN LA PALOMA