Ajuste de cuentas por drogas: mataron a una mujer y la prendieron fuego.

La Justicia dispuso el procesamiento de cuatro personas por el secuestro y homicidio de una mujer cuyo cuerpo apareció en el interior de un vehículo incendiado, hallado el pasado 15 de octubre en la zona de Tres Ombúes.

Tres de los enviados a prisión son hermanos del Betito Suárez, uno de los delincuentes más peligrosos que se encuentra actualmente en la cárcel. El cuarto es la pareja de una de las hermanas.

Se allanaron seis casas en el Cerro y en una de ellas se ubicó el auto utilizado por los delincuentes para escapar del lugar de los hechos.

Hace casi dos meses, Claudia Annabel Silvera, de 39 años, fue encontrada sin vida en el interior de su auto marca Citroen, modelo C3, de color gris. El coche fue incendiado en un baldío en Camino Tellier, en jurisdicción de la Seccional 19ª.

Un equipo policial a cargo del director de Información Táctica —integrado por personal de esa dependencia, de la Dirección de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas (Dgrtid) y del Área de Videovigilancia— permitió establecer la responsabilidad de los procesados.

Debido al historial delictivo de la mujer asesinada en este "ajuste de cuentas", la investigación del caso fue asumida por personal de la Dirección de Información Táctica y la Brigada Antidrogas.

De los datos obtenidos a partir del análisis de comunicaciones efectuadas en la zona de los hechos y una investigación reservada de la Dgrtid sobre un grupo dedicado al narcotráfico, surgieron datos idénticos en tiempos y espacios, tanto de escuchas telefónicas como de reportes de antenas que eran coincidentes con el momento del hecho. Por otra parte, personal del Área de Videovigilancia aportó información de relevancia a la investigación relativa al vehículo de la víctima en el cual huyeran los homicidas.

Marcelo Alejandro Cáceres Correa, de 27 años, quien ya estuvo preso hace dos años por soborno y seis delitos de hurto, fue procesado como coautor de un homicidio muy especialmente agravado y tenencia de drogas no para consumo.

Loly, una hermana del Betito, de 30 años, fue procesada como cómplice del homicidio al igual que su pareja, un hombre que también registraba antecedentes penales.

A Pablo Suárez, de 35 años, se le tipificó coautoría de homicidio muy especialmente agravada. Estuvo preso por diversos delitos, entre ellos otro crimen, y participó de un secuestro cinco días después de haber salido de la cárcel.

Ayer, otras dos personas permanecían emplazadas por este caso.

El peligroso delincuente Luis Alberto Suárez, apodado el Betito, fue uno de los integrantes de la banda que hace muchos años operó dentro del Penal de Libertad apodada los Betos, que fuera implicada en varias de las seis muertes que se registraron en esa cárcel únicamente en el año 2007.

En 2013, el juez del Crimen Organizado Néstor Valetti dijo en una conferencia realizada en la Universidad de Palermo, en Buenos Aires, que se trata "del delincuente más peligroso del país".

En tiempos en los que recorría libremente las calles de Montevideo, el Betito fue uno de los líderes de la "superbanda" que cometió sonados copamientos a locales de Abitab, empresas y supermercados.

Aquel grupo delictivo fue desbaratado luego de varios enfrentamientos con la Policía y el Betito cayó tras un accidente de tránsito en Las Piedras, al chocar de frente el vehículo en el que se desplazaba con sus cómplices contra una camioneta guiada por un productor rural, que perdió la vida. También murieron dos componentes de la gavilla.

Tras su procesamiento, fue recluido en el Penal de Libertad, donde con su hermano y otros delincuentes conformó la temida organización delictiva que fue tomando el control interno del establecimiento.

POLICÍA DESBARATÓ PELIGROSA BANDA