El embargo de un remolcador y una barcaza paraguaya, con la retención de la misma por varios días, son ejemplos de la escalada entre Argentina y Paraguay por el cobro de peajes en la Hidrovía Paraguay-Paraná dispuestos por el Ministerio de Transporte argentino.
Tras el embargo de dos barcos de bandera guaraní, Paraguay decidió tomar toda su parte (50%) de la energía generada por la usina binacional de Yacyretá, lo que obligó a Argentina a comprar electricidad a Brasil a un costo superior. En el pasado, el gobierno paraguayo usaba una porcentaje menor de la energía generada por la usina, lo cual beneficiaba a Argentina.
El cobro de peajes por parte de Argentina y la reacción paraguaya generaron contactos diplomáticos a alto nivel entre los cinco países para buscar una salida consensuada en el próximo encuentro del Comité Intergubernamental de la Hidrovía (CIH).
En una carta que accedió El País, la delegación argentina planteó una reunión tentativa de los cinco gobiernos para el jueves 14 a realizarse en la ciudad de Buenos Aires.
Luego hubo un intercambio de otras notas y la fecha del posible encuentro quedó pactado para el viernes 29 de este mes en Buenos Aires, según dijo una fuente ministerial a El País.
Se hará un encuentro previa de técnicos que analizaran el problema y luego se hará la reunión del Comité Intergubernamental de la Hidrovía. Se trata de una propuesta realizada a Uruguay, Argentina, Paraguay y Bolivia por la Embajada de Brasil. El país norteño ocupa la presidencia Pro Témpore del Comité Intergubernamental de la Hidrovía.
En forma paralela, la diplomacia paraguaya prepara a partir de hoy su informe que realizará en el encuentro. Para ello pidió a las navieras dueñas de las barcazas que circulan por la Hidrovía datos sobre los peajes que pagaron a Argentina.
Enfrentamiento
La decisión guaraní -ocupar el 50% de la energía de Yacyretá- fue una respuesta a un desaire argentino. El 25 de agosto pasado, el ministro de Economía y candidato presidencial de Argentina, Sergio Massa, viajó a Paraguay y se reunió con el presidente electo Santiago Peña. En la reunión, Massa acordó con Peña suspender por 60 días el cobro de peajes a barcazas paraguayas en la Hidrovía. Al terminar el encuentro, Peña anunció la medida en una conferencia de prensa. Poco después, el gobierno de Alberto Fernández, desmintió el acuerdo.
Con el conflicto como trasfondo, el 30 de agosto de este año se realizó en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), una reunión del Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná.
En el acta de la reunión, a la que tuvo acceso El País, el peaje cobrado por Argentina a las barcazas paraguayas en la Hidrovía fue uno de los puntos claves tratados por los diplomáticos y técnicos de los cinco países relacionados con la Hidrovía.
Según el documento, las delegaciones de Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay “coincidieron” en que la documentación presentada oficialmente por la delegación argentina “no ha logrado” demostrar la existencia de obras en el trecho comprendido entre el puerto de Santa Fe y la Confluencia con el río Paraguay que justifique el cobro de un peaje. De todas formas, los cuatro países entienden “la necesidad” de analizar la información técnica adicional presentada por Argentina en el ámbito de la Reunión Especial de Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná prevista en el artículo 37 de su Reglamento interno.
Dicho artículo señala que, en caso de que se mantenga la controversia con Argentina por el cobro de peajes en la Hidrovía, las partes iniciarán negociaciones directas para su resolución. Si las diferencias no se resolvieren, el Comité Intergubernamental de la Hidrovía someterá la cuestión a la decisión de la reunión de cancilleres de los países de la cuenca del Plata.
Argentina, por su parte, alegó en el encuentro realizado en Santa Cruz de la Sierra, que “no considera agotada” la instancia de abordaje técnico del tema y expresó que las disposiciones del procedimiento para la solución de controversias “no fueron observadas” permaneciendo aún el conflicto en el estado de consultas y negociaciones directas entre los países. También se acordó en la reunión establecer un plazo de 60 días para la presentación de la lista de árbitros de cada país para iniciar el procedimiento de solución de controversias.
El domingo 10, los gobiernos de Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay emitieron un comunicado conjunto donde “lamentan” las medidas impuestas por la República Argentina que “restringen” la navegación en la Hidrovía Paraguay-Paraná a partir de la aplicación de un “peaje unilateral y arbitrariamente establecido” al margen del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra y otras disposiciones internacionales.
Enorme flota
Paraguay tiene la tercer flota de barcazas del mundo circulando por la Hidrovía. Son 3.445 embarcaciones operadas por 46 compañías.
Fernando Porcelli, abogado de navieras paraguayas y experto en derecho marítimo, dijo a El País que “los que sufren los peajes argentinos no son solo las barcazas guaraníes. El peaje se le cobra a todos los buques que navegan desde Confluencia hasta Santa Fé”.
Si la navegación es de cabotaje, se cobra US$ 1.47 por tonelada. En caso de que la navegación sea de un país a otro, el peaje de US$ 1.45 por tonelada.
¿Por qué se da el conflicto Argentina-Paraguay? “Porque la mayor flota que navega por la Hidrovía es la paraguaya. Pero la realidad es que afecta a buques de Brasil, Bolivia, Paraguay y a Uruguay”, explicó el experto en derecho marítimo.
El peaje representa entre US$ 600 y US$ 1.800 en función de las dimensiones de las barcazas.