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“Actos inhumanos” en Moscú y Gaza “que sufre tanto”: el mensaje de Francisco tras la misa del Domingo de Ramos

El Papa Francisco no leyó la homilía y se mantuvo en silencio.

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Vaticano: Francisco saluda a una delegación de Ucrania.
Vaticano: Francisco saluda a una delegación de Ucrania.
Foto: AFP

AFP, EFE
El atentado terrorista del viernes en Moscú, que causó al menos 137 muertos, y las guerras en Ucrania y Gaza ocuparon el mensaje del papa Francisco tras la misa del Domingo de Ramos ayer en el Vaticano.

“Rezo por las víctimas del cobarde ataque de la otra noche en Moscú”, dijo Francisco de 87 años.

El pontífice calificó de “actos inhumanos” la matanza ocurrida el viernes en una sala de conciertos en las afueras de Moscú, que fue reivindicada por el grupo yihadista Estado Islámico (ISIS).

Francisco también alertó del “riesgo de una catástrofe humanitaria aún mayor” en Ucrania, al tiempo que recordó la situación de Gaza, “que sufre tanto”, durante el rezo del Ángelus posterior a la misa del Domingo de Ramos.

“Recemos por todos nuestros hermanos y hermanas que sufren a causa de la guerra, de modo especial pienso en la martirizada Ucrania, donde tantas personas se encuentran sin electricidad”, dijo ante los más de 25.000 fieles reunidos en la plaza de San Pedro.

Ello se debe a “los intensos ataques contra las infraestructuras, que no sólo causan muerte y sufrimiento, sino que conllevan el riesgo de una catástrofe humanitaria aún mayor. Por favor, no olvidemos a la atormentada Ucrania”, aseguró.

El papa también quiso recordar la situación de los palestinos: “Pensamos en Gaza, que sufre tanto, y en tantos otros lugares de guerra”.

Francisco leyó estos mensajes tras el Angelus, a pesar de que durante la misa del Domingo de Ramos decidió no pronunciar la homilía, sino que en su lugar se produjo un prolongado silencio.

Hace más de tres semanas, el papa Francisco tuvo una gripe y desde entonces aunque ha seguido con su agenda no ha podido leer en muchas ocasiones ya que se cansa al leer largos discursos.

La plaza de San Pedro estaba engalanada con las ramas de olivo y palmas que los fieles, religiosas y miembros de la Curia habían portado en procesión antes de la misa, recordando la entrada triunfal en Jerusalén de Jesús de Nazaret.

El papa presidió la misa del Domingo de Ramos, que abre las actividades de Semana Santa. Pero Francisco, que tiene una salud frágil, habló con una voz débil y entrecortada y no pronunció la homilía, como estaba previsto, aunque parecía de buen humor y sonriente.

El papa está aquejado por varios problemas de salud, fue sometido a una operación abdominal en 2023, tiene problemas crónicos de rodillas y ha sufrido varias infecciones respiratorias en los últimos meses.

El año pasado Francisco se ausentó por primera vez del tradicional Vía Crucis del Viernes Santo, una de las fechas más importantes del calendario de la Iglesia católica debido a que estaba convaleciente tras ser ingresado en un hospital y el clima fue inusualmente frío.

Ayer el papa Francisco también quiso homenajear a las últimas víctimas de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó de Colombia, una mujer y un niño de 14 años que fueron asesinados el pasado martes.

“Expreso mi cercanía a la comunidad de San José de Apartado, en Colombia. Hace pocos días fueron asesinados una joven y un niño”, dijo el pontífice al término del rezo del Ángelus posterior a la misa del Domingo de Ramos.

Y recordó que “esta comunidad en 2018 fue premiada como ejemplo de compromiso por la economía solidaria, la paz y los derechos humanos”.

Nallely Sepúlveda y Edison David, de 14 años, ambos miembros de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, fueron asesinados en ese municipio del departamento de Antioquia.

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