EFE
El Gobierno de facto de Afganistán ratificó una ley para la “Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio” que obliga al uso del velo para cubrir el rostro de mujeres, y condena la voz fuerte de mujer en público como una falta contra la modestia, implementando la interpretación más rigurosa de la ley islámica. Ya expresiones internacionales en contra de dicha obligatoriedad se levantaron, entre ellas España, Australia y la Unión Europea.
La ley relativa al Ministerio de la Virtud y Vicio fue ratificada por el Emirato Islámico de Afganistán, como se denomina el régimen de facto de los talibanes, confirmaron fuentes oficiales de los talibanes.
La ley de 35 artículos contiene cuatro capítulos que abordan cuestiones como el velo integral o hiyab para mujeres, la vestimenta de los hombres, y regulaciones de los medios de comunicación. “De acuerdo con esta ley, el Ministerio -para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio- está obligado a ordenar el bien y prohibir el mal (...) y también es responsable de la paz y la fraternidad entre la gente”, indicó el portavoz del Ministerio de Justicia, Barkatullah Rasooli, en una declaración publicada por el canal afgano Tolo News.
Además, el temido Ministerio deberá “impedir a la gente participar en prejuicios étnicos, lingüísticos y regionales”, agregó.
En el artículo que se refiere al hiyab, la norma establece como necesario que las mujeres se cubran el rostro y el cuerpo para evitar “causar tentación”, y evitar el sonido en público o de la voz en alto de mujeres, incluyendo cantar, recitar, o hablar frente a micrófonos. Asimismo prohíbe a los conductores transportar mujeres adultas sin un tutor masculino legal.
“La implementación de la sharia y el hiyab es nuestra línea roja. No podemos negociar con nadie sobre estos asuntos”, dijo en una reunión con las autoridades el ministro de la Virtud y el Vicio, Mohammad Khalid Hanafi, según Tolo.
Para los hombres, el artículo 22 prohíbe o condena el uso de corbata, afeitarse o recortar la barba por debajo de la longitud de un puño, o peinarse, como violaciones de la ley islámica.
La norma tiene también provisiones generales sobre los medios de comunicación y su obligación de adaptarse a la sharia, y la prohibición de “humillar o insultar a los musulmanes”, así como incluir imágenes de seres vivos.
Aunque gran parte de las prohibiciones relacionadas a mujeres o la vestimenta se han ido implementado en el país desde que los talibanes volvieron al poder, hace exactamente tres años esta ley supone la uniformidad y el rigor del castigo para imponer su cumplimiento.
España y Australia
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, expresó el rechazo total de España a la nueva ley de los talibanes que pretende silenciar a las mujeres, y volvió a condenar esta nueva vulneración de los derechos humanos.
“Rechazamos totalmente la llamada ley para la propagación de la virtud de los talibanes en Afganistán, que busca silenciar a las mujeres afganas. Condenamos toda vulneración de los derechos humanos y las libertades fundamentales de las mujeres y las niñas”, subrayó Albares.
La ministra australiana de Asuntos Exteriores, Penny Wong, se unió ayer sábado a las voces que critican la nueva ley. “Australia condena las medidas de los talibanes para silenciar las voces de las mujeres y niñas afganas (...) Expresamos nuestro apoyo a las mujeres y niñas de Afganistán y sus derechos humanos”, indicó Wong en su cuenta de X.