MANIFESTACIONES
Se registraron manifestaciones en unas 80 ciudades y en otros centros urbanos desde que empezaron las protestas hace una semana.
Al menos 50 personas murieron en la represión de las fuerzas de seguridad iraníescontra las protestas que estallaron tras la muerte de Mahsa Amini, arrestada por la policía iraní por no llevar el velo de forma adecuada, según Iran Human Rights (IHR).
Se registraron manifestaciones en unas 80 ciudades y en otros centros urbanos desde que empezaron las protestas hace una semana.
“Al menos 50 personas han muerto hasta ahora, y la gente sigue protestando por sus derechos fundamentales y su dignidad”, declaró a la AFP el director de la oenegé, Mahmood Amiry-Moghaddam.
“La comunidad internacional debe apoyar al pueblo iraní contra uno de los regímenes más represivos de nuestro tiempo”, añadió.
El balance oficial de los disturbios facilitado por las autoridades iraníes da cuenta de al menos 17 muertos, cinco de los cuales, miembros de las fuerzas de seguridad.
Mahsa Amini, de 22 años, fue detenida el 13 de septiembre en Teherán por la policía de la moral por vestir de manera “inapropiada”. Tres días después murió en el hospital y su fallecimiento provocó las protestas.
En Irán, las mujeres deben cubrirse el cabello y no se les permite usar abrigos cortos o ajustados o jeans con agujeros.
Desde Nueva York, donde asistió a la Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente Ebrahim Raisi pidió “diferenciar entre manifestantes y vandalismo” y prometió una investigación sobre la muerte de la joven.
Las autoridades iraníes decidieron organizar sus propias manifestaciones después de las oraciones del viernes.
Convocadas por una entidad que organiza actos oficiales, miles de personas marcharon en varias ciudades de Irán, en particular en el centro de la capital Teherán.
En la capital, cientos de personas, incluidas mujeres con chador, se manifestaron con banderas de Irán y con pancartas de apoyo y agradecimiento a la policía, según la televisión estatal.
“Muerte a los conspiradores”, “Abogar por el final del velo es la política estadounidense”, eran algunas de las consignas.
La Guardia Revolucionaria, el ejército ideológico de la República Islámica, alabó por su parte los “esfuerzos y sacrificios de la policía” y dijo que la reciente “conspiración del enemigo” está “condenada al fracaso”.
Tras el inicio de las protestas el 16 de septiembre por la noche, el gobierno limitó el acceso a Internet y desde el miércoles bloqueó Instagram y WhatsApp, una medida contra “las acciones a través de estas redes sociales de contrarrevolucionarios contra la seguridad nacional”, según la agencia Fars.
En este sentido Estados Unidos anunció el viernes el levantamiento de ciertas prohibiciones al comercio con Irán para permitir que las empresas de tecnología proporcionen plataformas y servicios que permitan a los iraníes acceder a internet.