La Nación/GDA
Un joven de 18 años, identificado como Tomás Valentín Tello Ferreira, fue asesinado a puñaladas por una patota mientras festejaba Año Nuevo este lunes por la madrugada sobre la costanera de Santa Teresita, en el Partido de La Costa, provincia de Buenos Aires. Por el crimen hay nueve detenidos hasta el momento, dos de ellos son menores de edad, informó la agencia Télam.

El brutal ataque ocurrió pasadas las 7 del 1 de enero de 2024 en el cruce de la calle 44 y la avenida Costanera de la mencionada localidad balnearia cuando Tello Ferreira -oriundo de Mar del Tuyú, Provincia de Buenos Aires- fue a festejar el comienzo del nuevo año con amigos y primos y fue interceptado por una decena de personas que comenzaron a agredirlo con un arma blanca y golpes de puño, por motivos que aún se desconocen.

Ante esa situación, Tello Ferreira intentó de escapar corriendo, pero fue interceptado en la mencionada intersección de calles, a metros del mar. En ese lugar, la patota comenzó a atacar al joven de 18 años con golpes de puño y, al menos, un arma blanca.

Como consecuencia del ataque, Tello sufrió al menos una herida punzocortante en el tórax, por lo que tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital de Santa Teresita, donde finalmente falleció.

Por su parte, los investigadores señalaron que hubo varios testigos del crimen y se logró la detención de nueve personas, dos de ellas menores de edad, según pudo saber el medio citado. Hasta el momento no se logró el hallazgo del arma homicida. Se esperan los resultados preliminares de la autopsia de la víctima para determinar las causas de su deceso.

Los siete mayores de edad detenidos están a disposición del fiscal Pablo Gamaleri, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 11 de Dolores, quien ordenó una serie de diligencias para determinar las circunstancias de lo ocurrido. En tanto, los dos menores de edad serán investigados por el Fuero de Responsabilidad Juvenil de esa jurisdicción.

Según indicaron fuentes policiales, uno de los agresores fue identificado como Damián Copelian (21), residente de Santa Teresita, quien fue aprehendido en la esquina de la avenida Costanera y calle 32, a unas diez cuadras de lo ocurrido, luego de que los registros de cámaras de seguridad y declaraciones de algunos vecinos lo situaran en la escena de los hechos.

Por otro lado, voceros judiciales indicaron al medio citado que en las próximas horas se esperan los resultados preliminares de la autopsia de la víctima para determinar las causas de su deceso.

Según Federico Moreira, periodista de Santa Teresita, la pelea habría comenzado en la Carabela de Santa María y concluyó a cinco cuadras. “Estamos hablando de cinco cuadras, donde corridas van y vienen entre tumultos de gente. Los jóvenes aprovechan para salir de fiesta y entre los excesos del alcohol suceden estos incidentes”, dijo en declaraciones para LN+. En ese sentido, afirmó que uno de los detenidos sería oriundo de la localidad balnearia y aún no se pudo determinar si los agresores conocían a la víctima. Moreira agregó que Tello habría sido trasladado por una ambulancia e ingresado al hospital con una herida en el pecho.

“Era un grupo grande de jóvenes que lo insultaban y le tiraban botellazos. Había una persona que acá creen que era el hermano, que estaba desesperado cuando lo veía desangrarse porque le habían pegado una puñalada”, contó en diálogo con TN Alejandro, empleado de un hotel ubicado a media cuadra de donde ocurrió el crimen. Y agregó: “Por lo que dicen venían del Galeon, un barco que está en la Costanera. En esa zona hubo fuegos artificiales anoche y siempre se juntan y ponen música. Desde esa zona venían persiguiéndolos”.

Sobre las razones del asesinato el empleado del hotel, dijo que la principal sospecha de quienes residen en la zona es que fue por “una rivalidad de fútbol, así empezó” y sostuvo que “el chico que falleció aparentemente es de la zona. Vive acá creo que con el padre y la abuela. No sé si el grupo y el chico fallecido ya se conocían de antes. Era una cantidad importante y todos contra él”.

Un video compartido por un particular muestra el momento de la pelea, en la que Tello es asesinado a puñaladas y luego golpeado por los agresores.

Antonieta Chinellato, periodista de Mar del Tuyú, afirmó que “quien lo perseguía a Tomás evidentemente le tenía mucha bronca y esperó a llegar a un lugar sin cámaras de seguridad, en una cuadra donde hay una construcción”.

“La policía tiene todo”, advirtió la periodista en LN+.

Por otro lado, Oscar Ronconi, subsecretario de Seguridad del partido de La Costa, indicó que se entregaron videos de una de las cámaras de seguridad a una cuadra del crimen. “Pudimos ver el movimiento de varios masculinos cuando iban hacia el lugar y luego cuando fueron corriendo hacia la playa”, dijo el funcionario en LN+. “Tomamos conocimiento de los hechos a las 6:50 por el llamado de un vecino al 911. El móvil tardó dos minutos y los efectivos se encontraron con la víctima lastimada de gravedad y se pidió la ambulancia”, agregó.

En enero de 2020, otro joven fue asesinado luego de una fiesta en la costa argentina. Se trata del caso de Fernando Báez Sosa, que tomó gran repercusión mediática. Y es que su caso vuelve a resonar por la similitud de las circunstancias y de las fechas. La víctima fue asesinada a golpes afuera del boliche Le Brique, en Villa Gesell, en medio de una pelea entre dos grupos de amigos.

Tras 16 audiencias, 87 testigos y cinco declaraciones indagatorias, el juicio por el homicidio concluyó el 12 de febrero de 2023 con los ocho acusados condenados a penas de entre 15 años de cárcel y prisión perpetua.

La jueza María Claudia Castro, presidenta del tribunal, sostuvo: “Ha quedado acreditado que Fernando Báez Sosa murió como consecuencia de brutales golpes recibidos durante el breve ataque propinado por múltiples agresores luego de haber quedado inmovilizado, semiinconsciente, tras recibir los primeros golpes. Desde que la víctima cayó al piso como consecuencia de los primeros golpes, momento en que gran parte de sus amigos se retiraron o fueron retirados del lugar, hasta que se produjo el óbito, se encontró en absoluto estado de indefensión, ya que producto de aquellos primeros golpes, quedó tendida en el piso en un estado de semiinconciencia que obturaba cualquier posibilidad de resistencia”.

Sus colegas adhirieron. La calificación de alevosía fue uno de los agravantes que sustentó la pena de prisión perpetua para aquellos que golpearon directamente a Báez Sosa en el suelo.