Gabriela Origlia, La Nación/GDA
Permanece activo un foco de incendio que comenzó el pasado domingo en el sector sur del cerro Champaquí, en el Valle de Traslasierra, situado en el oeste de la provincia de Córdoba (Argentina). El fuego afecta a unas 350 hectáreas y se intensificó este lunes por el viento. La zona tiene un complejo acceso por tierra, así que los bomberos que combaten las llamas son transportados vía aérea.
El Champaquí, con sus 2.790 metros de altura, tiene una de las vistas más completas de Córdoba y es muy elegido por los montañistas y amantes del turismo de aventura; cuenta con refugios, por lo que es uno de los destinos favoritos de los visitantes. Por año, suelen ser entre 40.000 y 45.000 las personas que llegan a la cima.
Roberto Schreiner, vocero de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático provincial, precisó que para llegar a la zona sur –cerca de Los Linderos, donde está el foco principal del incendio– se usan helicópteros y, después, los efectivos caminan entre cuatro y cinco horas. El frente del incendio tiene entre ocho y diez kilómetros.
Este martes se duplicó la cantidad de bomberos; están trabajando con unidades móviles livianas, aviones y helicópteros. Son unos 100 los que están en territorio.
Desde la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático aclararon que el foco de incendio no implica por el momento riesgo para viviendas. Las condiciones climáticas son desfavorables, con ráfagas de viento fuertes, lo que complica las tareas en altura.
Las llamas avanzan sobre pajonales de altura que están secos no solo por la falta de lluvias en los últimos meses, sino por los intensos fríos registrados en las semanas anteriores, cuando el termómetro marcó en la zona hasta 12 grados bajo cero.
El episodio ocurre en una época que es temporada de riesgo de incendios en Córdoba, por lo que se recomienda no quemar basura, no tirar colillas de cigarrillos, no hacer asados en zonas prohibidas y no quemar pastizales.
Durante el año pasado en la provincia hubo 446 incendios forestales, que afectaron una superficie total de 40.803 hectáreas. Los meses de julio, agosto y setiembre fueron el peor momento, con 228 eventos. Octubre registró la mayor superficie de hectáreas quemadas (15.650), un 38% del total anual.
Los datos surgen del Informe Anual 2023 del mapa oficial de áreas afectadas por el fuego desarrollado por la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, con el apoyo técnico y la infraestructura de Idecor. La superficie de área quemada en 2023 representa la mitad de la afectada durante 2022, cuando las llamas arrasaron más de 81.600 hectáreas. Sin embargo, el número de incendios se mantiene prácticamente constante, con 443 eventos registrados en 2022 y 446 en 2023.