Agencia EFE
Fernando Albareda, militante de una organización de derechos humanos de Argentina e hijo de policía desaparecido durante la última dictadura militar (1976-1983), fue detenido este jueves por el asesinato de su madre, un crimen que había disparado las alarmas entre activistas humanitarios ante la sospecha de un móvil ideológico.
Albareda, de 53 años, fue detenido en la ciudad argentina de Córdoba, en el centro del país, en el marco de un registro policial a su domicilio.
Según informaron fuentes oficiales, el hombre fue imputado como supuesto autor de homicidio calificado por el vínculo.
Susana Beatriz Montoya, de 74 años y madre de Albareda, fue asesinada en su casa de la ciudad de Córdoba el pasado 1 de agosto. Montoya era esposa del subcomisario de la Policía de Córdoba Ricardo Fermín Albareda, torturado y presumiblemente asesinado durante la dictadura argentina.
De acuerdo a un comunicado de la Fiscalía a cargo de la investigación del que se hacen eco medios locales, hay "profusos y contundentes elementos probatorios" que "llevan a sostener que existen motivos bastantes para sospechar de la participación" de Albareda en el asesinato.
Entre otras cosas, menciona que el Área de Grafocrítica de Policía Judicial ha podido "establecer preliminarmente" que los manuscritos hechos en la pared de la casa de la víctima y los mensajes amenazantes anónimos denunciados por el propio imputado en diciembre pasado presentan "características similares" a la forma de escribir de Albareda.
El hombre, integrante de la asociación H.I.J.O.S. -que agrupa a hijos de víctimas del último régimen militar-, había denunciado en diciembre pasado haber encontrado un cartel con esvásticas, mensajes intimidatorios y seis proyectiles de arma de fuego: "Sos hijo de Terrorista. Se te terminaron los amigos de la Policía. No vayas más a la EZC (escuela) ni a la Jefatura. Va a morir. Te vamos a juntar con tu papito (sic)", decía aquel menaje.
Luego denunció haber hallado a su madre asesinada junto con un mensaje que decía: "Los vamos a matar a todos. Ahora vamos por tus hijos. #Policía".
Estos mensajes llevaron a H.I.J.O.S. y a otras organizaciones de derechos humanos en Argentina a exigir a la Justicia de Córdoba y al Ejecutivo el esclarecimiento del crimen y de las amenazas.