La Nación/GDA
La gran incógnita que mantuvo en vilo a Juntos por el Cambio se despejó anoche. En una elección interna que se tornó relevante para la pelea presidencial entre Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, el dirigente radical Maximiliano Pullaro superó por un amplio margen a la senadora nacional Carolina Losada en las primarias de Unidos para Cambiar Santa Fe, el “frente de frentes” que conformaron el Pro, la UCR y el socialismo para desbancar al peronismo en esta provincia, y se consagró como candidato del espacio para tratar de suceder a Omar Perotti en los comicios generales del próximo 10 de septiembre.

Pullaro superó a Losada por casi 30 puntos: obtenía el 59% de los votos de la interna del conglomerado opositor. Fue un triunfo que superó todas las previsiones. La senadora radical, que superaba el 32%, reconoció la derrota minutos después de las 21. Felicitó a su rival y sostuvo que lo “importante” de la elección es que “al peronismo le haya ido muy mal”, afirmó, escoltada por Federico Angelini, su compañero de fórmula y dirigente de Pro cercano a Bullrich y Mauricio Macri.

Tras una campaña cargada de tensión, que estuvo atravesada por un alto nivel de confrontación y denuncias cruzadas de alto impacto, Pullaro, el postulante respaldado por Larreta, venció a Losada, promovida por Bullrich y Macri, en la competencia interna del principal conglomerado opositor al PJ en Santa Fe, el tercer distrito electoral más importante del país.

Unidos para Cambiar Santa Fe fue la fuerza más votada y superó por 50 puntos a la alianza oficialista Juntos Avancemos, que agrupó a las diversas ramas internas del peronismo y el kirchnerismo. Con esa diferencia sobre el PJ, JxC quedó con chances certeras de ganar la gobernación en los comicios generales. En el radicalismo consideran que Pullaro quedó a las puertas del poder.

Cuando restan menos de cuatro semanas para las PASO, Larreta respiró aliviado en Santa Fe. Ganó su partida frente a Bullrich y logró enviar una señal de fortaleza en uno de los territorios más densamente poblados del país con vistas a la reñida disputa con la exministra por la candidatura presidencial de JxC.

Larreta había puesto una gran expectativa en la elección en Santa Fe. Jugó a todo o nada para sumar una victoria propia que levante el ánimo en su tropa, que luce cada vez más inquieta por la consolidación de Bullrich en los sondeos.

Después de los triunfos de Claudio Poggi en San Luis y Marcelo Orrego en San Juan, anhelaba celebrar en Santa Fe la victoria de otra de sus apuestas electorales en el interior.

En el larretismo consideran que se trata de un triunfo simbólico sobre el ala dura de Pro: cree que se impuso el diálogo y la apuesta a la amplitud versus la estrategia de la confrontación de Bullrich.