EFE, AFP
La justicia argentina ordenó la detención de 61 ciudadanos brasileños que se encuentran en Argentina y tienen pedido de extradición por el asalto a los tres poderes públicos de Brasil perpetrado en enero de 2023, confirmó este viernes a la AFP una fuente judicial.
La orden de detención fue emitida por el juez Daniel Rafecas a pedido del Superior Tribunal de Justicia de Brasil y alcanza a 61 ciudadanos brasileños, que se encuentran en Argentina y tienen "condenas con sentencia firme a penas de prisión efectiva", añadió la fuente.
La policía de Brasil detuvo a cientos de presuntos vándalos, financistas e incitadores de los asaltos ocurridos una semana después de la toma de posesión del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El 10 de junio de este año, Brasil informó que había pedido ayuda a Argentina para localizar en su territorio la posible presencia de más de 140 fugitivos de la asonada.
"Ya hay dos personas detenidas", dijo la fuente este viernes. "En cualquier lugar de Argentina donde sean identificados o ubicados serán detenidos y puestos a disposición del juzgado para comenzar el proceso de extradición".
En octubre, el gobierno argentino modificó su ley sobre el estatus de refugiado, para dejar de conceder ese beneficio a los extranjeros que hayan sido imputados o condenados en sus países.
Un detenido en La Plata
Uno de ellos fue detenido por la Policía de la provincia argentina de Buenos Aires. Se trata de Joelton Gusmao de Oliveira, un brasileño sobre el que pesaba un pedido de captura por el asalto. Gusmao de Oliveira, de 47 años, fue detenido este jueves en la ciudad de La Plata.
Según informaron fuentes del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, la captura se produjo cuando efectivos policiales vieron en la calle a un hombre en "actitud sospechosa" y, al proceder a su identificación, los sistemas informáticos arrojaron que sobre Gusmao pesaba una orden de captura y extradición emitida por la Justicia de Brasil.
La detención fue notificada a un juzgado del fuero Criminal y Correccional federal de Argentina, que avaló el accionar de la Policía bonaerense.
Según el Ministerio de Seguridad bonaerense, Gusmao de Oliveira fue condenado a 17 años de prisión por su participación en "crímenes contra la democracia".
La asonada fue promovida por seguidores de Bolsonaro, derrotado en las urnas en 2022 por Lula da Silva, y tenía como objetivo incitar a las Fuerzas Armadas a derrocar al actual mandatario, que había asumido el poder una semana antes.