La Nación/GDA
Bariloche es un destino habitual para los viajes de los adolescentes uruguayos y argentinos, conocido tanto por su vida nocturna como por las actividades que pueden hacerse en el día, como esquiar o jugar en la nieve.
En los últimos días se confirmó que al menos 180 liceales argentinos que se habían trasladado hacia la ciudad de Bariloche se contagiaron de norovirus, cuyos síntomas principales son diarrea, vómitos, dolor abdominal, naúseas, fiebre y cefalea.
La noticia fue confirmada luego de que varios familiares de alumnos que regresaron avisaran de que algo estaba ocurriendo con los menores. Al consultar con otros colegios que también habían enviado a sus estudiantes a la ciudad del sur del país, se constató que el problema era generalizado.
De acuerdo con lo publicado por el diario El Cordillerano los primeros indicios tuvieron lugar el 16 de julio, cuando la municipalidad recibió una denuncia sobre casos de gastroenteritis en un hotel que alojaba a egresados.
Tras ello personal de Epidemiología, Salud Ambiental y Bromatología se acercó al lugar para tomar muestras de orina de los afectados que luego fueron enviadas al Instituto Malbrán en Buenos Aires, que confirmó la presencia de norovirus.
Al respecto habló el doctor Rodrigo Bustamante, del área de epidemiología del Hospital Regional de Bariloche, quien afirmó de acuerdo con lo publicado por el sitio Cadena 3 que el norovirus es “altamente contagioso”.
Asimismo el profesional remarcó que el contagio se produce por contacto con materia fecal o vómitos o alguna superficie contaminada y que nada tiene que ver con el agua o la comida. También remarcó que los contagios masivos pueden estar directamente relacionados con el ingreso del virus a los hoteles en los que se hospedan los estudiantes. “El lavado de manos es algo muy importante antes de comer y después de ir al baño”, indicó.
“Generalmente los hoteles nunca están vacíos, lo cual hace bastante difícil que se pueda hacer una limpieza bien a fondo”, sumó y aseveró que desde la provincia de Río Negro ya implementaron medidas de prevención como ventilar habitaciones y desinfectar áreas comunes.
Por su parte desde el gobierno local confirmaron que no hubo hospitalizaciones y que se abrió una investigación para precisar la fuente de contagio.
Esta no es la primera vez que Bariloche sufre un episodio como este: hubo un brote anterior en 2019, que afectó a más de 1300 estudiantes y obligó a restringir el ingreso de nuevos grupos a Bariloche.
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