María Julieta Rumi, La Nación / GDA
Wenance, la fintech que no había pagado intereses por $500 millones de sus tres fideicomisos privados en Argentina, que también estaba teniendo inconvenientes con su funcionamiento en Uruguay y que le había prometido un plan de pagos a los inversores, finalmente se presentó en concurso preventivo de acreedores. Según su CEO, Alejandro Muszak, la herramienta les permitirá “seguir funcionando como empresa y cumplir los compromisos de manera creíble, realizable y con un trato igualitario para todos”.
En diálogo con La Nación, Muszak dijo que trataron de evitar esta circunstancia “cambiando la forma de prestar y haciendo reducción de costos”, pero que no llegaron “a tiempo”.
En este sentido, admitió que el plan de pagos que le habían ofrecido a los inversores se cae. La empresa le había propuesto a personas que pusieron hasta $3 millones de capitalun pago en 12 cuotas a partir del mes de agosto y, luego, dos cuotas de interés compensatorio.
En tanto, para los casos que superaran ese monto, la propuesta había sido dolarizar al tipo de cambio MEP en el mes de julio al 8% anual.
“Durante el mes de julio ofrecimos este plan a acreedores y, si bien la aceptación había sido buena, el solo hecho de que hubiera gente que recurriera a juicios y embargos, nos llevan a tomar esta decisión al no poder conformar al 100%. La medida concursal nos permite levantar embargos para seguir funcionando”, continuó Muszak.
De acuerdo con esto, dijo que el nuevo plan de pagos va a ser en los términos que indique el concurso, que “tiene una mirada igualitaria, sean acreedores chicos o grandes”.
Consultado por este diario, Diego Ferrari, socio de Cambiaso & Ferrari, dijo que resulta clave conocer cuál es el proyecto de subsistencia de la empresa que ofrece al concurso, es decir, cómo va a subsistir cuando la confianza y los activos duros realizables son importantes para que los acreedores entiendan la propuesta.
“El concurso está orientado a preservar la vida de la empresa subyacente, repartiendo las perdidas entre todos, incluyendo los fiscos, trabajadores y acreedores. Con el concurso, armás un paquete de tu pasado y lo reorganizas de manera tal de que no te afecte presente y futuro. Pero, sin activos que permitan seguir girando tu empresa, no existe concurso posible porque no podés pagar las cuentas del pasado (empaquetadas) ni del presente ni del futuro. Entonces no tendría sentido. Hay que ver qué presentan y qué proponen”, explicó.
De acuerdo con Wenance, sus activos son los créditos que ofrece -que se fondeaban con los fideicomisos- y la tecnología. Las operaciones de Uruguay y España seguirían funcionando, si bien en Uruguay ya anunciaron que no iban a poder encarar los compromisos asumidos por lo menos temporalmente.
En Uruguay, Wenance no tiene un fideicomiso, sino que vende la cartera de los créditos que ofrece a los inversores. En este caso, lo que no pagó son intereses y algunos retiros de capital que estaban pactados o programados.
“Ante los hechos sucedidos en nuestra filial en Argentina, que son de público conocimiento, queremos comunicarte que nos vemos obligados a suspender los pagos de los servicios de interés y capital ya pactados, en el tiempo acordado”, expresa la comunicación que Wenance envió a sus clientes uruguayos a fines de julio según había informado El Observador.