AFP
Sesenta mujeres acusan de agresiones sexuales al fallecido magnate egipcio Mohamed Al Fayed, expropietario de los grandes almacenes londinenses Harrods y padre de Dodi, quien fuera pareja de la princesa Diana. Eran 37 denuncias hace una semana, dijeron ayer sus abogados.
“Hasta la fecha, hemos respondido a más de 200 solicitudes y mensajes de todo el mundo. Confirmamos que ahora representamos a 60 supervivientes y vendrán más”, afirmaron los letrados en un comunicado, insistiendo en el alcance “cada vez más internacional” del caso.
Los abogados afirmaron el pasado viernes que “en todo el mundo” hay víctimas de Al Fayed, fallecido en agosto de 2023, y animaron a otras mujeres agredidas por el magnate egipcio a denunciar sus casos. La semana pasada las denunciantes eran 37, procedentes de Malasia, Australia, Italia, Rumanía, Estados Unidos y Canadá.
Algunas de las agresiones de las que se acusa al magnate sucedieron en lugares como Saint Tropez, en el sureste de Francia, y Abu Dabi.
“Esperábamos que se hubieran producido abusos dondequiera que fuera Mohamed Al Fayed. Desgraciadamente, parece ser cierto. Ahora hemos recopilado pruebas creíbles de agresiones en otras de sus propiedades y negocios. Especialmente relativas al Fulham Football Club”, señalaron los abogados.
Mohamed Al Fayed, nacido el 27 de enero de 1929 en un modesto suburbio de la ciudad egipcia de Alejandría, pasó gran parte de su vida en Reino Unido, donde se convirtió en propietario de Harrods en 1985 y del club de fútbol Fulham FC entre 1997 y 2013, un período en el que el equipo londinense fue finalista de la Europa League en 2010.
El multimillonario, que también era dueño del Hotel Ritz de París y que murió con 94 años, vendió los grandes almacenes en 2010 al fondo Qatar Investment Authority, por 1.500 millones de libras (2.200 millones de dólares).
Las mujeres que acusan al magnate, según los abogados, “han perdido toda confianza en Harrods”, pidiendo “un proceso independiente y transparente” para evaluar y pronunciarse sobre estos cargos.
La actual dirección de los famosos grandes almacenes afirmó el jueves que el antiguo propietario había instaurado “una cultura tóxica” en la empresa, añadiendo que ha llegado a “acuerdos amistosos” con algunas de las acusadoras.