Redacción El País
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva mantuvo ayer miércoles dos reuniones en paralelo a la Asamblea General de la ONU en Nueva York, una con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, y otra con el mandatario estadounidense Joe Biden.

En el encuentro con Zelenski tiene lugar tras varios cruces por la guerra en Ucrania. “Reunión importante con Lula. Luego de nuestra discusión honesta y constructiva, instruimos a nuestros equipos diplomáticos a trabajar en los próximos pasos en nuestras relaciones bilaterales y esfuerzos de paz. El representante brasileño seguirá participando de las reuniones de la Fórmula de Paz”, publicó el presidente ucraniano en su cuenta de X.

Lula, por su parte, compartió una foto con su homólogo ucraniano. “Hoy me reuní en Nueva York con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski. Tuvimos una buena conversación sobre la importancia de los caminos para construir la paz y mantener siempre un diálogo abierto entre nuestros países”, apuntó el mandatario en la misma red social.

Antes del encuentro, Lula había dicho que no tenía expectativas en concreto. “No tengo expectativas con Zelenski. La expectativa es una conversación de dos presidentes de dos países, cada uno con sus problemas y con sus visiones”, dijo a los periodistas fuera del hotel donde se hospeda en Nueva York.

El mes pasado, Zelenski había dicho a EFE que Lula “coincidía” con “las narrativas de (el presidente ruso Vladimir) Putin”. “Espero que (Lula) tenga una opinión propia. No me parece que sea necesario que sus pensamientos coincidan con los del presidente Putin”, aseveró.

Lula ha sido crítico tanto con Rusia como con Ucrania. El año pasado aseveró que su par ucraniano era “tan responsable como Putin” de la invasión en su país. Sin embargo, en las últimas semanas bajó el tono a sus declaraciones. En su intervención ante la Asamblea General el martes, Lula afirmó que la guerra en Ucrania es una prueba de la “incapacidad” de ese organismo y de la comunidad internacional, que apuesta más en las armas que en la paz.

Por otro lado, la reunión con el presidente estadounidense transcurrió con elogios y advertencias de Lula sobre la democracia, a la que consideró “cada vez más en peligro”.

Como ejemplo, se refirió a Argentina en una evidente indirecta al candidato libertario Javier Milei.

“Cuando miramos la geopolítica en el mundo, percibimos que las oportunidades son cada vez más estrechas y la democracia está cada vez más en peligro porque la negación de la política ha hecho que sectores de extrema derecha ocupen espacio en todo el mundo. Esto ya pasó en Brasil, y ahora empezó en la Argentina y está pasando en muchos otros países”, advirtió.

Biden, por su parte, habló de la clase trabajadora. “Las dos democracias más grandes del continente estamos defendiendo los derechos humanos en todo el mundo, y eso incluye los derechos de los trabajadores”.

El presidente estadounidense reivindicó su política económica que, según él, facilita que “la clase trabajadora tenga la oportunidad de ascender”.

“Nunca antes había visto a un presidente de Estados Unidos hablar tanto y tan bien de los trabajadores como usted habla”, expresó Lula a su turno. El mandatario brasileño dijo que eso es especialmente importante para él, y recordó que viene del mundo sindical y ha detectado que “el trabajo se ha precarizado, los salarios son muy bajos y los trabajadores trabajan por menos”.

Biden y Lula demostraron sintonía a pesar de las discrepancias sobre la guerra de Ucrania, en la que Lula ha sido crítico con la postura de Estados Unidos de apoyo inquebrantable a Kiev. (Con información de EFE y AFP)