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Bombardeo de Israel contra Hezbolá en Siria aumenta la tensión en la región

Desde octubre, Hezbolá ha atacado casi a diario objetivos en el norte de Israel desde el Líbano. Israel responde a esos ataques, golpeando blancos en territorio libanés cada vez en más profundidad.

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Sube a 42 el número de muertos por bombardeos de Israel en Siria, según una ONG
Desde el 7 de octubre, Israel intensificó sus ataques a elementos proiraníes en Siria.
Foto: EFE

EFE, AFP
Al menos 42 soldados sirios y combatientes del grupo terrorista libanés Hezbolá murieron en un ataque israelí ayer viernes en la zona de Alepo, en el norte del país, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). En respuesta al ataque, el grupo chií libanés reivindicó el lanzamiento de varios misiles de alto calibre Burkan, con capacidad para portar ojivas de hasta media tonelada, contra un cuartel militar en el norte de Israel.

El bombardeo en Alepo dejó el saldo más mortífero en las filas del ejército sirio por un ataque israelí desde que en octubre comenzó la guerra en la Franja de Gaza entre el Estado hebreo y la organización terrorista palestina Hamás, según la organización OSDH, con sede en Reino Unido y una amplia red de fuentes en Siria.

Una fuente militar siria, citada por la agencia de prensa oficial Sana, informó de “varios muertos y heridos entre civiles y soldados” por el ataque israelí contra posiciones del ejército en los alrededores de Alepo.

“El enemigo israelí lanzó un ataque aéreo contra diferentes posiciones en Athriya, en el sudeste de Alepo”, dijo esta fuente.

A lo largo de ayer, Hezbolá anunció la muerte de siete de sus combatientes, si bien, como es habitual, no especificó dónde ni cómo fallecieron.

En la madrugada de ayer hubo, además, acciones dirigidas contra fábricas que dependen del Ministerio de Defensa sirio en Safira, cerca de Alepo, pero que ahora están bajo control de grupos proiraníes, según el OSDH.

Por su parte, el Ministerio de Exteriores sirio calificó de “agresión terrorista” los bombardeos israelíes. “La República Árabe Siria condena la agresión terrorista lanzada hoy (por ayer) al amanecer por la entidad de ocupación israelí contra varios puntos de Alepo, que provocó la muerte y heridas a varios civiles y soldados, además de pérdidas materiales”, dijo Exteriores sirio en un comunicado. También ayer, el ejército israelí anunció que mató en el sur de Líbano a un responsable de la unidad encargada de misiles del movimiento Hezbolá. El muerto es Ali Abdel Hassan Naim, “uno de los líderes de la unidad de cohetes y misiles de Hezbolá“, precisó el ejército.

Desde que comenzó este conflicto, Hezbolá, en solidaridad con el Hamás palestino, ha atacado casi a diario objetivos en el norte de Israel desde el sur de Líbano.

Israel ha respondido a esos ataques de Hezbolá, golpeando blancos en territorio libanés cada vez en más profundidad, los últimos a más de 100 kilómetros de la frontera. En paralelo, el ejército israelí intensificó desde octubre sus ataques a elementos proiraníes en Siria, un país en el que ha venido atacando numerosos objetivos desde que en 2011 empezara allí la guerra civil.

Bombardeo de Israel a Hezbolá en Alepo
Bombardeo de Israel a Hezbolá en Alepo

A mediados de este mes, el ejército israelí anunció de hecho que había atacado “alrededor de 4.500 objetivos de Hezbolá“ en Líbano y Siria desde el estallido de la guerra con Hamás en Gaza.

En lo que va de año, el Estado judío ha atacado el territorio sirio en 28 ocasiones, la mayoría de ellas por vía aérea, de acuerdo con OSDH.

Sobre el ataque de ayer en Siria, el portavoz de la cancillería iraní, Naser Kanani, denunció “una violación de la soberanía y de la integridad territorial de Siria, y una amenaza seria a la paz y la seguridad regionales e internacionales”.

Hezbolá cuenta con elementos en Siria, que han apoyado al presidente Bashar al Asad en la guerra civil de ese país y han continuado operando para proteger sus líneas de abastecimiento con Irán.

Teherán afirma que su presencia en Siria se limita a asesores militares.

Respuesta

Hezbolá dijo ayer en un comunicado que sus combatientes atacaron sobre las 12:40 hora local “la sede del comando general de la brigada 91 en el cuartel de Biranit con misiles Burkan” que, según la organización proiraní, “impactaron de forma directa”.

De acuerdo con la nota, esta acción fue efectuada “como parte de una respuesta a los ataques del enemigo israelí en Damasco y Alepo” de las horas previas.

Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que hubo dos lanzamientos de proyectiles desde el sur del Líbano hacia el cuartel de Biranit, sin especificar si el ataque provocó víctimas o daños materiales, según un comunicado castrense.

Asimismo, las FDI agregaron que minutos después del lanzamiento, aviones de combate israelíes alcanzaron la lanzadera y, posteriormente, atacaron “un complejo militar de Hezbolá adyacente”, sin aportar más detalles.

Aviones de combate israelíes también atacaron instalaciones del grupo chií en varias zonas del sur del Líbano, de acuerdo con la nota.

Un musulmán lee un manuscrito gigante del Corán durante el Ramadán
Un musulmán lee un manuscrito gigante del Corán durante el Ramadán
Foto: AFP

RAMADÁN

Unos 125.000 musulmanes rezaron en jerusalén

Unos 125.000 musulmanes rezaron ayer, en el tercer viernes de Ramadán, en la mezquita de Al Aqsa, en la Ciudad Vieja en Jerusalén, sin que se produjeran incidentes significativos, informó el cuerpo de Policía. Según el Waqf, la autoridad islámica que gestiona el complejo de la Explanada de las Mezquitas, donde se encuentra la mezquita de Al Aqsa y que constituye el tercer lugar más sagrado para el islam tras las urbes de La Meca y Medina, fueron 125.000 las personas que participaron en las oraciones. No se produjeron disturbios ni episodios de violencia, y de acuerdo con la Policía israelí, once personas fueron arrestadas en la Ciudad Vieja, incluidas varias sospechosas de “incitación y apoyo al terrorismo”, lo que en Israel puede significar ondear en público una bandera palestina. Hasta el momento, está siendo un mes sagrado tranquilo y que contradice los pronósticos del ministro de Seguridad Nacional, el derechista y antiárabe Itamar Ben Gvir, quien auguraba violencia como consecuencia de la guerra en la Franja de Gaza o de la escalada de represión militar en Cisjordania.

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