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La medida comenzó el lunes; este miércoles se reunieron con el presidente Temer
El presidente brasileño, Michel Temer, dijo que recibió este miércoles a miembros de sindicatos de camioneros que están en huelga desde el pasado lunes y que pidió una "tregua", pero fuentes de esos gremios aclararon que no fue aceptada.
"Tuvimos una reunión con representantes de los camioneros, con el ministro de Hacienda (Eduardo Guardia) y otras autoridades", dijo el mandatario, y apuntó que "desde el domingo" el gobierno trabaja para "darle tranquilidad a los brasileños y tratando de encontrar una solución, que tranquilice también la vida de los camioneros".
El gobernante indicó, en declaraciones a periodistas, que en esa reunión pidió una "especie de tregua, para que en dos o tres días, como máximo, se pueda encontrar una solución".
Sin embargo, el presidente de la Confederación Nacional de los Transportadores Autónomos (CNTA), Diumar Bueno, dijo que la "tregua" no ha sido aceptada, "porque el Gobierno no presentó nada nuevo ni ninguna propuesta concreta".
Aclaró, no obstante, que los sindicatos continuarán "conversando" con las autoridades del Ejecutivo a fin de encontrar una respuesta a sus demandas, que pasan básicamente por una reducción de los precios del diésel, que se han disparado en las últimas semanas.
La protesta comenzó el pasado lunes precisamente por la continua alza de los precios de ese combustible, que la estatal Petrobras atribuye a los aumentos del petróleo en los mercados internacionales y, también en parte, a la fuerte devaluación que ha sufrido el real.
El gobierno ha dicho que alcanzó un acuerdo con el Parlamento para eliminar los impuestos aplicado al diésel y contener así el alza de los precios.
Sin embargo, el ministro de Hacienda, Eduardo Guardia, condicionó la decisión y afirmó que los tributos serán suspendidos una vez que el Congreso apruebe una medida para eliminar beneficios fiscales que favorecen a otros sectores, a fin de no afectar la recaudación, pues de otro modo se agravaría el ya elevado déficit fiscal.
Los camioneros han estacionado sus vehículos en carreteras de casi todo el país y en algunos casos han bloqueado el tránsito, lo cual se siente sobre todo en el estado de Sao Paulo, el más poblado, próspero e industrializado.
El malestar de los camioneros también ha afectado las operaciones en el puerto de Santos, en el litoral paulista, considerado la mayor terminal de cargas de América Latina y cuyos accesos habían sido bloqueados parcialmente por los manifestantes.
Tanto en Sao Paulo como en Río de Janeiro, dos de las principales ciudades del país, diversas fuentes confirmaron que ha comenzado a escasear combustible en las gasolineras y que sucede lo mismo con otros productos, entre los que se incluyen hasta alimentos.
La huelga de los transportistas ha afectado hasta a la empresa de Correos, que hoy suspendió la entrega de encomiendas expresas debido a que no puede garantizar su distribución.
Según la compañía estatal, "los índices operacionales de calidad de la cadena logística" han sido limitados por los bloqueos en las carreteras y el servicio solo podrá ser retomado una vez que "el tránsito recupere su normalidad".