Candidato considerado por China como un peligroso “separatista” gana las elecciones presidenciales en Taiwán

Presidente electo Lai Ching-te prometió defender a la isla de las “intimidaciones” de Pekín y afirmó que, de facto, ya funciona como un país independiente de China.

Compartir esta noticia
Lai Ching-te es el nuevo mandatario de Taiwán y prometió defender la isla de Pekín
Lai Ching-te es el nuevo mandatario de Taiwán y prometió defender la isla de Pekín.
Foto: AFP fotos

AFP, EFE
El candidato Lai Ching-te, considerado por China como un peligroso “separatista” por sus posiciones proindependentistas, ganó ayer la elección presidencial en Taiwán y prometió defender a la isla de las “intimidaciones” de Pekín.

El hasta ahora vicepresidente y favorito en los sondeos, miembro del gobernante Partido Demócrata Progresista (DPP), obtuvo el 40,5% de los sufragios, según los resultados del 100 % de votos escrutados. Asumirá el próximo 20 de mayo.

Estas elecciones se celebraron a la sombra de las amenazas de China, que considera que esta isla es parte de su territorio y nunca dejó de proclamar su intención de “reunificar” el país, por la fuerza de ser necesario.

“Estamos decididos a proteger Taiwán de las intimidaciones y amenazas continuadas de China”, dijo Lai Ching-te en su discurso de la victoria, en el que se comprometió también a mantener la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán.

“Le estamos diciendo a la comunidad internacional que entre democracia y autoritarismo, estaremos del lado de la democracia”, añadió, celebrando un “nuevo capítulo”.

Su principal adversario, Hou Yu-ih, candidato de Kuomintang (KMT) que preconiza un acercamiento con Pekín, admitió su derrota. “Respeto la decisión final del pueblo taiwanés” y “felicito a Lai Ching-te (candidato rival) y a Hsiao Bi-khim (compañera de lista) por su elección”, declaró Hou Yuh-ih a sus seguidores.

La elección de Lai, que se definió a sí mismo como un “pragmático trabajador por la independencia de Taiwán” en el pasado, augura un clima de tensión aún mayor en el estrecho de Taiwán, puesto que Pekín no ha dejado de insistir en la necesidad de culminar la “reunificación” con la isla.

A lo largo de la campaña el próximo mandatario prometió continuar las políticas de la actual presidenta, Tsai Ing-wen, para mantener la paz en el estrecho de Formosa: aumentar las capacidades militares, reforzar la independencia económica, estrechar los lazos con las principales democracias del mundo y construir un liderazgo basado en principios.

Sin embargo, Lai no considera necesario declarar formalmente la independencia de Taiwán, argumentando que la isla ya funciona, de facto, como un país independiente bajo el nombre de la República de China.

La sociedad taiwanesa ya ha empezado a dar la espalda al continente: sólo un 30 % de los ciudadanos insulares se identifica como taiwanés y chino, mientras que la proporción de los que se ven únicamente como taiwaneses asciende al 62,8 %, según los últimos datos de la Universidad Nacional de Chengchi.

China

Antes de las elecciones China instó a los taiwaneses a tomar “la decisión correcta” si quieren evitar la guerra y describió a Lai Ching-te como un peligroso “separatista”. El ejército chino prometió el viernes “aplastar” cualquier intento de “independencia” de Taiwán, situada a 180 km de sus costas.

El estatus de Taiwán, donde viven 23 millones de personas, es asunto espinosos de la rivalidad entre China y Estados Unidos, que compiten por la influencia en esta región estratégica. China afirmó ayer que la “reunificación” con Taiwán es “inevitable” pese a la victoria Lai Ching-te, de un partido independentista.

La votación “no obstaculizará la inevitable tendencia a la reunificación” del país, afirmó Chen Binhua, portavoz de la oficina china responsable de las relaciones con Taiwán.

ESTADOS UNIDOS SE PRONUNCIA

En pro de la “paz y la estabilidad”

El presidente de EE.UU., Joe Biden, reiteró ayer sábado la oposición de EE.UU. a una independencia de Taiwán, tras la victoria del oficialista William Lai en las elecciones presidenciales.

“No apoyamos la independencia” del territorio, señaló al ser preguntado en Washington por reporteros sobre los resultados de las elecciones en Taiwán.

Las declaraciones del mandatario llegaron horas después de que el secretario de Estado, Antony Blinken, felicitará a Lai por su victoria en un comunicado, donde señaló también que EE.UU. está comprometido con la “paz y la estabilidad” en la región.

“Esperamos trabajar con Lai (...) y promover nuestra relación no oficial de larga data, en consonancia con la política una sola China”, subrayó en un comunicado.

La elección de Lai, del Partido Democrático Progresista (PDP), cimentó la apuesta de Taiwán por el soberanismo y augura un recrudecimiento de las tensiones con China. La cuestión taiwanesa es punto de fricción entre China y EE.UU., que, al margen de ser el principal proveedor de armas a Taiwán, podría verse ante la tesitura de tener que defender a la isla en caso de conflicto. EFE

Democracia e identidad propia

Taiwán, reivindicado por China como un territorio propio, dispone de moneda, bandera, ejército y gobierno democrático, pero no está reconocido como Estado independiente por Naciones Unidas ni la mayoría de países. Después de décadas de gobierno autoritario, Taiwán se transformó en una vibrante democracia en los años 90 y surgió su sentimiento de identidad.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

TaiwanChinaEstados Unidos

Te puede interesar